martes, 30 de diciembre de 2014

Nuevos vientos en Cuba

La revolución cubana de 1959, en su momento representó un duro revés político para la hegemonía de Estados Unidos en América Latina. Después de la Segunda Guerra Mundial, habían emergido dos superpotencias, que en los años posteriores no vacilarían en pretender implantar sus respectivas ideologías políticas y ostentar el dominio global; se había iniciado la llamada Guerra Fría entre el bloque socialista soviético y el bloque occidental capitalista liderado por Estados Unidos. En estas circunstancias parecía increíble que un grupo de jóvenes barbudos revolucionarios, ponía en jaque el poder imperial estadounidense, ante sus propias narices, a escasos kilómetros del territorio norteamericano, hasta el punto de poner al mundo al borde de una guerra nuclear. Ventajosamente el sentido común se impuso ante los líderes mundiales, para contrarrestar una catástrofe de la que nadie hubiese salido victorioso.

Frente a los ajetreos de la geopolítica, la revolución cubana salió victoriosa, incluso después de una intervención militar sobre la isla, patrocinada por la misma tenebrosa CIA. Este triunfo generó mucha alegría y esperanza en los sectores populares y clases desposeídas de toda Latinoamérica, e incentivó a que los revolucionarios de la región tomen el modelo cubano de lucha, para captar el poder y ofrecer una alternativa de Estado y modelo económico tendiente a eliminar la explotación y la marginalidad. El modelo socialista cubano dio en su momento una gran lección de dignidad a los pueblos del mundo, en el sentido de que se puede luchar por una independencia total y la autodeterminación. Pero ese modelo idealizado en su momento, se había petrificado en un radicalismo totalitario, para enfrentar amenazas internas como externas a su revolución, luego terminaría desfigurándose dentro de la dependencia e influencia soviética.

Para la degradación económica y política de Cuba, tuvo su golpe certero, el embargo comercial, económico y financiero contra la isla, por parte del gobierno de los Estados Unidos, quienes dolidos en su orgullo, no tuvieron contemplación alguna en condenar y sancionar al pequeño país caribeño. Un bloqueo monstruoso, como decían sus líderes, que ha durado más de medio siglo de vigencia, y recién a estas alturas cuando ya sus dirigentes están en la decrepitud, se avizora señales de su eliminación. Efectivamente en estos días con la liberación de Alan Gross exfuncionario de la USAID y de tres cubanos acusados de espionaje, el presidente Barack Obama hizo uno de los anuncios más importantes de su gestión en términos políticos, que es la de reanudar las relaciones diplomáticas con Cuba, dando así una vuelta de página a una historia de medio siglo de acusaciones mutuas, que entrelazan temas de espionaje, política internacional, democracia y respeto a los derechos humanos.


A pesar de que las opiniones al respecto como siempre estarán divididas, considero que es la mejor noticia para cerrar el presente año. Éste, es un paso importante para que las puertas de la isla se abran al mundo y viceversa, para que los cubanos tengan más oportunidades y libertad en cuanto al modelo de Estado que quieren dejar a sus hijos. Para que realmente puedan evaluar y revaluar a sus dirigentes, los logros y los fracasos de aquella revolución que demandó de grandes sacrificios a sus connacionales.     

jueves, 18 de diciembre de 2014

La casa de la Conaie

Es increíble cómo una serie de desaciertos políticos al interior del movimiento  que gobierna el país, va debilitando su hegemonía y popularidad en los últimos años. El pedido de desalojo de la sede de la Conaie, por parte del gobierno nacional, así lo evidencia. Entiendo que muchos líderes sociales alrededor de Latinoamérica incluso, se han solidarizado con la máxima representación del movimiento indígena ecuatoriano, y no era para menos, la Conaie con sus errores y aciertos, constituye el producto de luchas históricas que se gestaron hace muchísimos años, con el patrocinio de líderes indígenas y no indígenas como Dolores Cacuango, Tránsito Amaguaña o el mismo Monseñor Leonidas Proaño, que en su tiempo cuestionaron el sistema de explotación y marginación a los que se sometía a las poblaciones indígenas, de manera oficial desde la época de la colonia.

Una gran pregunta de mama Lourdes Tibán, a la que me sumo, es el ¿qué dirán los y las expachakutik -brazo político de la Conaie- que ahora están de Felipillos con el poder? Ahí desfilarían una serie de nombres como la de Virgilio Hernández, Doris Solís, Miguel LLuco, Gilberto Talahua, Ricardo Ulcuango y la misma señora Gabriela Rivadeneira entre muchísimos otros más. El libreto sobre esto ya es conocido, se someterán a una reverencial venia ante el todopoderoso, bajo aquel cansón discurso de la defensa del susodicho “proceso revolucionario”. Estamos seguros que la historia será justa y sabrá juzgarlos correctamente.


Pero esto deja un sabor amargo. Los pueblos originarios y sus representantes tratados como extranjeros en su propia tierra. ¿De qué plurinacionalidad podemos hablar, mientras unos hacen fiesta con los recursos extraídos de las entrañas de nuestra madre tierra y otros no tengan ni siquiera para el “arriendo” y peor aún una sede propia donde funcionar? Claro que algún frívolo, de esos que hay muchos, podrían decir que como cualquier organización o asociación tienen que gestar su casa con sus propios recursos; pero aquí no estamos hablando de una asociación cualquiera, sino de una representación de una nacionalidad reconocida dentro del texto constitucional.  

Democracia degradada

No nos engañemos, en los últimos años en el Ecuador la democracia se ha degradado. Hace unos ocho años, una mayoría abrumadora de ecuatorianos y ecuatorianas, cansada del viejo juego político de la llamada “partidocracia”, apoyó un nuevo proyecto político y electoralista de un grupo de jóvenes e intelectuales de izquierda, que ante la caída del bloque socialista en Europa y aparentemente el derrumbe ideológico de la izquierda universal, no habían perdido las esperanzas de captar el poder y dar una alternativa de gobierno, ante el fracasado modelo neoliberal que se habían impuesto, años atrás en toda la región. Al escuchar como propuesta el llamado a una asamblea constituyente y la refundación política del Estado ecuatoriano, con  una participación mayoritaria de sectores que fueron tradicionalmente marginados de la vida política del país, hizo palpitar muchos corazones y avizorar nuevos horizontes, mientras el brillo de nuestros ojos aumentaba.

Los años han pasado y se han realizados cambios muy importantes en el país. Pero nuestra representatividad política se ha tornado sórdida y maliciosa. Nuestros representantes ante el poder político, han robado la primicia de la verdad absoluta y se han alejado en forma abismal de su pueblo; para guarecerse en la embriaguez del poder y del servilismo, que los hace pensar, que son los elegidos de la profecía histórica de nuestro país e incluso más allá. Todos sabemos que el poder embrutece y que se necesita ser sumamente cauto, para no caer en la maraña de la soberbia, el egocentrismo y la malicia. Nadie puede atribuirse el conocimiento supremo, la inteligencia absoluta o la representatividad total, en el “arte” de gobernar un pueblo; si pensamos de esta manera, estamos frito y próximos a quemarnos.

Qué pena mirar a un grupo de jóvenes ecologistas, arrodillados y con las manos arriba frente al autobús de la Caravana Climática, acosados infamemente por la Policía Nacional, a su paso por el Ecuador, hacia la cumbre ambientalista COP20, que se realizó en Lima. O la actitud chabacana del máximo de la cancillería, quién dijo que “Si alguien quiere visitar nos avisa y si nosotros queremos lo aceptamos…”, al negar la entrada a un grupo de congresistas alemanes interesados en conocer de cerca el caso Yasuní; pone en evidencia la exagerada arrogancia con la que se puede mirar desde las alturas del poder.  Por último la pretensión del gobierno con la orden de desalojo a la sede de la Conaie en la ciudad de Quito, que hace más de 20 años, algún gobierno de sensibilidad social puso a nombre de la máxima organización indígena del país, nos deja en claro que la intención del gobierno es desmantelar todo rastro deliberativo, frente a cualquier decisión oficial. 

Con una prensa libre acosada, las instituciones del Estado más subordinadas al líder que a la legalidad, indígenas minimizados, estudiantes presos, consultas populares a la carta y el deseo de perennizarse en el poder; es fácil pensar que ya no velarán por los intereses del pueblo, sino del suyo propio y de su grupo servil. Así, claro que nuestra democracia se ha degradado.    

La virgen morena

Uno de los fenómenos sociales y religiosos más admirables de nuestra América profunda, es sin lugar a dudas, el culto a la Virgen de Guadalupe de la ciudad de México. Más allá de la creencia divina y el milagro que es una cuestión de fe, el fenómeno Virgen de Guadalupe, tiene su origen en la conflictividad religiosa y política que demandó la conquista de los pueblos amerindios por parte de los españoles. De acuerdo a la tradición mexicana, en 1531 la Virgen María se apareció cuatro veces al indígena Juan Diego Cuauhtlatoatzin en el cerro de Tepeyac, y se atribuye a un milagro, la revelación de la imagen en el  ayate o manta de Juan Diego, y se mantuvo así uno de los grandes misterios de todo México, país creyente y Católico por tradición.

En cuanto al origen de la imagen, se puede especular a dos sectores interesados, que pudieron ser sus gestores: se conoce que en la época precolombina en el cerro de Tepeyac, se veneraba a la diosa mexica de nombre Tonantzin, que significa “nuestra madre” y pudo haber sido una reconfiguración de aquella divinidad aborigen, para ser venerada dentro del canon cristiano católico, sin mayores contratiempos; así pudo haber sido una creación nativa. Su aspecto morena y el simbolismo encontrado en el grabado de la virgen, así lo sugieren. Por otro lado, también pudo haber sido una recreación de la Virgen María, más apegada a la realidad mexicana, con el objetivo de calmar a las masas, ante una posible rebelión en contra de la nueva religión impuesta y el dominio peninsular en tierras aztecas.


En todo caso, sea cual fuese el motivo de su origen, no hay duda de que la pintura es un “milagro” de algún habilidoso mortal. Los creyentes mexicanos y latinoamericanos se encargaron de convertir la figura de la Virgen de Guadalupe, en una divinidad real, como la patrona del sincretismo religioso americano y del mestizaje. Se dice que “la fe mueve montañas” y esa es la fe que mueve la esperanza y los corazones de millones de personas, que depositan su amor y su devoción, ante la Virgen Morena alrededor de todo el mundo. Hoy es su aniversario y se recuerda la última de sus apariciones ante el mítico Juan Diego.    

jueves, 27 de noviembre de 2014

Corea del Norte y Ecuador

Después del fin de la Segunda Guerra Mundial, en 1945, la Península Coreana ubicada en la parte oriental de Asia, al igual que Alemania, fue dividida en dos partes, la del norte ocupado por los soviéticos y la del sur por Estados Unidos. Al hilo de las potencias extranjeras una gran nación quedó dividida en dos partes, en dos ideologías irreconciliables y una desconfianza fratricida que perdura después de más de medio siglo de persistencia. El deseo de unificar a la nación, bajo una de estas visiones políticas, llevó a la llamada Guerra de Corea en 1950, una guerra subsidiada por las potencias extranjeras, entre ellas Estados Unidos, la República Popular China y la Unión Soviética, en lo que se consideró el primer conflicto armado de la Guerra Fría.

Corea del Norte patrocinada por China, adoptó el comunismo y tiene uno de los regímenes políticos más totalitarios y aislados del mundo, bajo la figura de República Popular Democrática. Kim II Sung fundador del Estado norcoreano, es considerado el Presidente Eterno de la República. Su hijo Kim Jong-II fue comandante supremo del ejército y quien dominó el país hasta su muerte. El hijo menor de Kim Jong-ll, Kim Jong-Un a sus 27 años, fue nombrado heredero de los poderes políticos de su padre en el año 2010. Según Amnistía Internacional y otras fuentes, en Corea del Norte se aplica la tortura, la pena de muerte, la detención y el encarcelamiento arbitrarios. Además se habla de la existencia de campos de concentración y violaciones severas a los derechos humanos. Las libertades básicas como la de expresión y movilidad están suprimidas totalmente.

Este repaso histórico viene al caso, justo cuando la semana pasada, la representación del Ecuador ante la Comisión de Asuntos Sociales, Humanitarios y Culturales de la Asamblea General de las Naciones Unidas, votó a favor de este país asiático y en contra de una resolución en la que se alienta al Consejo de Seguridad, que considere la posibilidad de remitir el caso de las violaciones a los derechos humanos en Corea del Norte, a la Corte Penal Internacional. Solamente los países no alineados, encabezados por Cuba, Irán, Bielorrusia, Bolivia, Venezuela, Siria, Rusia y China, apoyaron a Corea del Norte y se opusieron a los numerales 7 y 8 de la resolución.

S.O.S. en Otavalo

La inversión de un millón de dólares en la remodelación del parque central de Otavalo, fue un gasto considerable de la administración anterior. En tal virtud se debería cuidar y optimizar el uso de este espacio público, en beneficio de propios y extraños. Muchos acudimos en la noche, acompañados de la familia, a tener momentos de esparcimiento en dicho espacio verde; pero lamentablemente a más de los perros callejeros que frecuentan, el sitio se percibe oscuro, a excepción de unos cuantos faroles, que apenas expenden una luz tan tenue, que torna en nostálgico y frío, lo que debería ser uno de los atractivos más cálidos y significativos de Otavalo; a propósito, una de las bien estructuradas bancas del parque, seguramente por acción de algún desadaptado, se empezaba a destruirse, ante el desinterés de sus cuidadores.

Estamos convencidos, creo que todos, de que el turismo es un potencial que Otavalo e Imbabura no deberían desperdiciar. Debe prevalecer el respeto, recalco nuevamente, a los espacios públicos. Se debe controlar la invasión a las veredas por parte de vendedores ambulantes y dueños de locales comerciales; cómo es posible que muchas veces, tengamos que caminar con nuestros niños por la calle, a disposición de ciertos conductores peligrosos. Por otro lado, nadie ha podido vencer la venta ilegal del licor artesanal y la presencia de malandrines bebiendo en la vía púbica, en el sector del Batán de la ciudad de Otavalo; tornando aquel barrio en peligroso e intransitable, en especial para los escolares que tienen que caminar por el lugar. ¡Hasta cuándo!

Por otro lado, estamos seguros que en la ciudad, debe haber autoridades de sanidad, tendientes a controlar el aseo en comedores y restaurantes de toda índole. Se puede observar por todo lado gente que manipula dinero y alimentos al mismo tiempo, de la misma manera se ve alimentos exponiéndose a la intemperie, sin protección alguna. Sanitarios sin los implementos adecuados de limpieza. Lamentablemente todo esto nos marca como un pueblito más de algún país tercermundista, a pesar de que en las altas esferas se hable del “milagro ecuatoriano”. Envío un S.O.S. a las autoridades competentes de la ciudad de Otavalo.

Estado autóctono

Bolivia está a la posta de convertirse en el primer Estado indígena de América. Con el ascenso de Morales a la presidencia en 2005, Bolivia tiene un genuino representante de las mayorías indígenas, dispuesto a transformar una realidad social, demacrada por la marginalidad y la injusticia. Más allá de los elogios y cuestionamientos que se pueden dar entorno al presidente Evo Morales, que ya va por su tercer mandato consecutivo en Bolivia, nadie puede negar que a pesar de su cansino discurso antiimperialista, su pragmatismo económico es digno de reconocimiento; incluso el Fondo Monetario Internacional, una institución censurada por Morales, ha alabado sus prudentes políticas económicas. A esto se suma también la bonanza económica por los altos precios de la materia prima, como el gas que vende a Brasil y Argentina.

Esto le ha permitido establecer una política social y económica, ordenada en beneficio de los más necesitados, a través de bonos, a estudiantes y madres por ejemplo, o la reducción del analfabetismo al 4%, condición establecida por la Unesco para considerar a un territorio libre del analfabetismo. Además con la ayuda de médicos procedentes de Cuba, se han realizado miles de curaciones gratuitas y operaciones de la vista en los sectores campesinos, indígenas y de escaso poder adquisitivo en las ciudades. También se ha permitido la concreción de obras de infraestructura en ciudades y rincones de todo el país, como el emblemático teleférico que une a la ciudad de El Alto con La Paz.

Más allá de la reivindicación social, está la reivindicación cultural y étnica. Por hoy como algo inédito, no es raro ver en las oficinas públicas e incluso en los despachos ministeriales, ponchos y polleras en todos los ambientes. En las reuniones de gabinete presidencial, al igual que en las plazas de las poblaciones rurales más alejadas, se masca la tradicional hoja de coca; y es que Evo Morales literalmente prometió “llevar a los ponchos al poder”. Los apellidos que por lo general se relacionan con los estratos más humildes de la sociedad boliviana, por hoy se repiten con frecuencia en los consejos de ministros, las alcaldías o las instancias judiciales. La lengua quechua y aimara se ha reivindicado y se empieza a utilizar con soltura y sin prejuicios en diferentes eventos públicos y privados. La gente originaria o autóctona, en especial los que viven en El Alto, empieza a visibilizar una identidad propia que a lo mejor se mantenía oculta. Ahora ser una cholita es un símbolo de prestigio, y muchas que dejaron de utilizar su tradicional indumentaria, han comenzado a retomar nuevamente, sin miedo a ser discriminadas.

La identidad andina boliviana incluso se ha extendido como complemento magistral a la arquitectura, con la introducción de una nueva propuesta autóctona a cargo del conocido arquitecto Freddy Mamani, llamado también el rey de la arquitectura andina, ha recreado la simbiosis de la cultura local, en docenas de vistosas construcciones, donde el uso de pinturas de colores, formas geométricas, salones de baile de dos pisos con capacidad para cientos de personas, candelabros importados de china, luces intermitentes en las columnas; rompen las reglas de la arquitectura tradicional boliviana. Bolivia ha cambiado para bien.

Irresponsabilidad y muertes

Por más alegre y tranquilo que uno salga en su vehículo, la irresponsabilidad y la impericia de muchos conductores, no tarda en quitarnos el buen aire y dañarnos el resto de nuestro día. Conductores que no respetan para nada la luz roja de los semáforos, buseros que más parecen querer volar, infinidad de taxistas que manejan sin Dios ni ley, conductores y conductoras que esperan llegar a la esquina, para si es que se acuerdan activar sus direccionales, gente que no tiene idea de cómo utilizar los carriles de la autopista, entre tantos otros, revelan por qué el Ecuador es uno de los países con altos índices de percances automovilísticos.

Debemos reconocer que la campaña de control de velocidad que se realizó hace un tiempo, fue efectiva, se notaba que los conductores se preocupaban por la velocidad de sus automotores, para evitar las sanciones que por cierto son demasiadas drásticas. Pero esto tiene que ser permanente y se debe ampliar los controles. No nos cansaremos de decir que en el tema de los accidentes de tránsito, lo que hace falta es concienciación permanente y control. No bastarán las leyes que se emitan y remitan, por más drásticas y extrañas que sean, si solo se quedan en los textos jurídicos.

Aproximadamente según las estadísticas vigentes, en nuestro país 13 personas mueren diariamente en accidentes de tránsito y otras 152 quedan heridas. El promedio anual de accidentes de tránsito en el país fue de 24.750, en el periodo comprendido entre 2009 y 2013. Mientras que el promedio de las víctimas mortales, del 2008 al 2013, fue de 4.808 personas, según el sistema SOAT, y dentro de esto el 95% de responsabilidad corresponde al factor humano, entre las que prima la famosa “impericia del conductor”. Un dato curioso anota, que de los 1.3 millones de personas que fallecen en las carreteras a escala global, esto es 1 muerto cada 30 segundos; el 90% de víctimas mortales pertenecen a países de ingresos bajos. Esto podría interpretarse que al subdesarrollo económico, viene atado el subdesarrollo educativo.

viernes, 31 de octubre de 2014

Cementerio indígena

Alguien decía que en Otavalo hasta los cementerios están separados, uno de mestizos y otro de indígenas. La estúpida inercia de todos nosotros y en especial de las autoridades de poder efectiva, es innegable. Si no somos capaces de vivir la unidad en la diversidad y de respetarnos en nuestras diferencias, hasta me atrevería a decir que deberíamos ir pensando en abandonar la tierra que nos vio nacer. Más acá de esta penosa realidad, el cementerio indígena de Otavalo, desde que fue entregado a las comunidades usuarias, se ha convertido en botín apetecido de ciertos dirigentes, no todos, que a vista y paciencia de sus dueñas, han usufructuado a sus anchas, desde los inicios mismos de la “autoadministración”.

A veces la lidiadera sirve para aprender, pero en el caso del cementerio indígena la lidiadera es crónica y proyecta de alguna forma la incapacidad de sus dirigentes de gestionar una administración formal, cumpliendo con los requerimientos técnicos y legales que demanda una empresa o institución que maneja recursos económicos públicos o comunitarios. A veces a merced del discurso indigenista, se renuncia a parámetros de convivencia o gestión que son universales y aplicables a cualquier sociedad. Muchos dirigentes confunden el término empresa con privatización y rehúyen ante cualquier deseo de formalizar algún emprendimiento comunitario, para que sea efectiva, transparente y auto sostenible.

Es necesaria que la juventud indígena profesional se involucre más en los asuntos comunitarios, para que ellos den luces a los dirigentes en temas relacionados con la administración. El problema no es la incapacidad en sí misma, sino la visión y la noción de la evolución cultural que ha sido ampliamente politizada y secuestrada por una arenga etnocentrista, que nos priva muchas veces de las bondades del desarrollo. Como un ejemplo concreto pongo a colación el éxito de las cooperativas indígenas de ahorro y crédito, un ejército de jóvenes indígenas profesionales y otros no, que se han vuelto diestros en la administración de empresas a nivel nacional, y esto lejos y aparte del discurso lloriqueante y paternalista que se ha adueñado del movimiento indígena.

Verdades a la luz

Esto no es una fantasía, tampoco es un best seller que al puro estilo de Dan Brown, pretende excavar lo más profundo de nuestras creencias religiosas, para levantar una polvareda de pasiones, vender y acumular cantidades exorbitantes de dólares. El libro de Charles C. Mann que en castellano se titula, “1491: Una nueva historia de las Américas antes de Colón”, es un ensayo histórico, con un amplio sustento arqueológico por ende científico; tendiente a marcar un hito y un rompimiento, de lo que hasta ahora hemos tenido de verdades históricas, en lo referente a la América precolombina. Cuando nuestros “taytas y mamas” hablan de nuestro esplendoroso pasado, no es en son de una añoranza romántica, de una civilización truncada por la llegada de los peninsulares, sino que después de varios siglos opacidad, sigue grabada en la memoria de nuestros genes.

Charle C. Mann, uno de los periodistas de ciencia más serios y respetados de EE. UU., revela que de conformidad con los descubrimientos recientes, en distintos campos del conocimiento, la población americana -los indígenas de América-, era muchísima más numerosa de lo que se pensaba hasta ahora, millones de personas a lo largo y ancho de este continente, localizadas casi todas ellas en asentamientos permanentes, dotadas de una cultura enormemente rica y variada, con acceso a tecnologías avanzadas y con un importantísimo impacto al medio ambiente, hasta el punto de afirmar que el Amazonas es más bien un producto de la actividad humana, “un artefacto humano” más que de la naturaleza; contradiciendo la afirmación casi religiosa del ambientalismo militante. La selva amazónica según arqueólogos y científicos, pudo haber sido una suerte de un inmenso cultivo de árboles, que proveían de sombras para muchas especies productivas, que dotaban de alimentación para los numerosos habitantes de esa región. Esto se pudo confirmar cuando desde un avión se pudo visualizar, una vez abierta la selva por la deforestación, grandes obras de ingeniería agrícola y urbana en la zona del Beni, en Bolivia.

Otra de las revelaciones suministradas por Mann, es que las inmensas praderas de Norteamérica, fueron creadas por los indígenas, gracias a grandes incendios controlados, con el fin de abrir espacios para el pastoreo. O que la primera ciudad de la historia, apareció en el desierto de lo que ahora es Chile, antes que en Mesopotamia, como afirma la historia tradicional. A la fecha, en el llamado Nuevo Mundo, había más habitantes que en el continente europeo y algunas ciudades como Tenochtitlán, tenían una población mayor que cualquier ciudad del viejo continente; con agua corriente, hermosos jardines botánicos y calles de una limpieza inmaculada. Para más pruebas recordemos las figuras de Nazca o los monolitos de Tiahuanaco, para solo mencionar dos, a los que incluso se les atribuye a visitantes de otros planetas, por restar méritos a nuestros sabios ancestros.

Ahora se preguntarán, ¿qué es lo que pasó con esas brillantes civilizaciones, adelantadas para su época? Eso fue antes del apocalipsis de una pandemia, que se resume en la palabra virus, en especial de la viruela, una de las armas de destrucción masiva más poderosas que introdujeron los invasores y que prácticamente aniquiló la quinta parte de la población mundial.

sábado, 18 de octubre de 2014

Los kurdos y su lucha

La historia contemporánea todavía está llena de acciones, que tienen que ver con la lucha por su liberación, de muchos pueblos alrededor del mundo. Un ejemplo concreto es el caso de los kurdos, un pueblo marcado por el colonialismo y los conflictos bélicos del Medio Oriente, durante más de dos mil años. Pero repasemos quienes son los kurdos: Es la minoría étnica sin Estado, más grande del Medio Oriente, con un aproximado de 30 millones de personas, repartidas en lo que actualmente comprende Turquía, Siria, Irak e Irán; pero unidos por una lengua propia, una cultura milenaria y un sentido de nacionalismo, que todavía no se ha dejado arrebatar sus sueños políticos de tener su propio Estado, llamado Kurdistán.

En la época actual la geopolítica marcada por el belicismo, nuevamente se llena de protagonismo en la región de Oriente Medio. Como relevo de la otrora organización paramilitar yihadista Al Qaeda, el llamado Estado Islámico, se ha hecho con amplias regiones de Irak y Siria, al amparo de los conflictos bélicos que asedian a esas naciones. Es en este contexto que los kurdos ubicados en el norte de Irak, que tenían una cierta autonomía política, han ganado protagonismo internacional al enfrentarse al extremismo del Estado Islámico, organización catalogada de terrorista, que tiene como objetivo establecer en esa región, tal cual como su nombre lo dice, un Estado islámico fundamentalista y antioccidental.

El ajedrez geopolítico mundial, nuevamente les lanza la oportunidad a los kurdos, de reclamar y abogar ante la comunidad internacional, su derecho histórico de establecer su propio país. Pero los protagonistas en este juego político de fichas, no dejarán fácilmente que las aspiraciones kurdas florezcan, como es el caso de Turquía, país donde está una de las mayorías kurdas que ha reclamado a las autoridades locales, que se les permita cruzar la frontera, para unirse a sus hermanos que combaten al Estado Islámico en Siria. No podemos ocultar nuestra simpatía, por los pueblos milenarios que luchan por su libertad.

miércoles, 15 de octubre de 2014

Sarayaku y los derechos indígenas

Sarayaku es una comunidad indígena kichwa de la Amazonía ecuatoriana, específicamente de la provincia oriental de Pastaza. Su nombre que en castellano significa “río de maíz”, ha trascendido las fronteras nacionales y se ha convertido en sinónimo de resistencia y dignidad para los pueblos indígenas del continente, más que todo, por su lucha contra la explotación petrolera en sus territorios ancestrales. No hace mucho esta comunidad fue tema de noticia internacional, por acoger dentro de su territorio, al exasambleísta Cléver Jiménez, su asesor Fernando Villavicencio y Carlos Figueroa, quienes fueron sentenciados por injuriar al presidente Rafael Correa. El hecho fue comentado como una especie de asilo político, dentro de una comunidad indígena. Recordemos que en 1992, en el gobierno de Rodrigo Borja, se adjudicó a este pueblo indígena unos 135 000 hectáreas de su territorio.

En el litigio mantenido con el Estado ecuatoriano, la comunidad de Sarayaku salió favorecida con la sentencia de la Corte Interamericana de Derechos Humanos en 2012, el fallo determinó la responsabilidad del Estado ecuatoriano, por no haber realizado una consulta previa, libre e informada, sobre la explotación petrolera en sus territorios, y paralelamente ordena reparar a la comunidad, por violaciones a sus derechos colectivos, enmarcados en instrumentos jurídicos internacionales vigentes, como la de haber colocado explosivos en su territorio ancestral, sin su consentimiento. La sentencia de la Corte supranacional, a más de pagar una indemnización a la comunidad, en un hecho inédito, también obliga a que el Estado ecuatoriano pida disculpas públicas a la comunidad afectada, que en efecto se produjo el pasado 1 de octubre.

La legislación internacional vigente, de la cual Ecuador es subscriptor, como la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos indígenas, o el Convenio 169 de la OIT, reconoce plenamente los derechos de los pueblos originarios a escala global. Lamentablemente la falta de actualización, el desconocimiento de juristas y políticos sobre derechos indígenas, ha entorpecido sincronizar con las legislaciones nacionales y por ende obstaculizar su aplicación.

Es propicio recordarles que en Asamblea General de la ONU, el 13 de septiembre de 2007, afirma “que los pueblos indígenas son iguales a todos los demás pueblos…” y reconoce el derecho a ser diferentes y a ser respetados como tales; a la autodeterminación, en virtud del cual éstos determinan libremente su condición política y persiguen libremente su desarrollo económico, social y cultural. En el articulado de esta declaración, se reconoce plenamente a los pueblos indígenas, el derecho a conservar y a reforzar sus propias instituciones políticas, jurídicas, económicas, sociales y culturales; manteniendo a la vez su derecho a participar plenamente, si lo desean, en la vida política, económica, social y cultural del Estado. Las personas indígenas tienen derecho a pertenecer a una comunidad o nación indígena, a practicar y revitalizar sus tradiciones, su cultura, su lengua. El o los Estados tienen la obligación moral y jurídica de adoptar medidas eficaces, conjuntamente con los pueblos indígenas, para que se cumplan estas leyes.

Los otavalos

En Ecuador han sido reconocidos 14 nacionalidades y 18 pueblos indígenas. Uno de esos pueblos perteneciente a la nacionalidad kichwa, es el de los otavalos, asentados históricamente en sus territorios comprendidos entre los cantones de Otavalo, Antonio Ante y Cotacachi, de la provincia de Imbabura. ¿Pero quiénes son los otavalos? Es la etnia más reconocida dentro y fuera de las fronteras nacionales, por su carácter mindalae –comerciantes nativos de tradición ancestral- a quienes muchas veces se los ha comparado con los fenicios de la antigüedad. Su tradicional pelo largo trenzado, su sombrero, pantalón blanco, alpargatas y poncho azul en los hombres; blusa bordada con flores multicolores, anaco oscuro y blanco en las mujeres, los delata en cualquier lugar del mundo su origen étnico cultural.

Con más de 10 mil años de historia, según vestigios arqueológicos; en cuanto al origen de las comunidades imbayas, sarances y otavalos, sí podemos afirmar que en un momento de la migración, tribus procedentes de la rama antillana, fueron interactuando por la necesidad de subsistir con grupos de cazadores-recolectores, lo que generó en un segundo momento, un conocimiento del medio, de las plantas y de los animales; a tal punto que desarrollaron sistemas adelantados de agricultura, irrigación, domesticación, y en una forma lenta y paulatina, empezaron a producir ricas expresiones artesanales, alcanzando también niveles elevados de organización y de producción.
Estas formas de organización fueron las que codiciaron los incas, quienes comandados por Túpac Yupanqui, avanzaron hacia la región de Otavalo, con el afán de dominarlos; ante la cual Hualcopo y Caranqui, junto a otros caciques de Cayambe y Otavalo, organizaron una resistencia inquebrantable que duró aproximadamente 17 años. Seguidamente a las guerras incásicas, llegó la invasión española, a la que guerreros como Píntag y Nazacota Puento, debilitaron tenazmente en su momento, las agresiones de los invasores.

En los obrajes de la época colonial y como proveedores de tejidos en la época republicana, los otavalos fueron ganando reconocimiento y prestigio entre las poblaciones indígenas del país. El Pueblo Kichwa Otavalo es esencialmente migrante, pero con profundas raíces de pertenencia a su territorio, su apertura al comercio nacional e internacional, lo ha colocado como uno de los pueblos indígenas con mayor prosperidad económica en el país y quizá en toda América. El proceso migratorio se inicia en la década de 1940, a países cercanos en sus inicios y otros tan lejanos como Corea y Japón después. En muchos países y de manera especial en Europa y Estados Unidos, conforman colonias muy importantes de otavaleños, donde con las limitaciones del caso, siguen desarrollando y practicando la cultura de sus ancestros.

Actualmente se puede afirmar que los otavalos, ofrecen sus productos artesanales, así como sus manifestaciones culturales, en casi todo el mundo. Factores de carácter histórico: como su tradición mindalae y de tejedores; otros factores relacionados con la particularidad del ser kichwa-otavalo, como son el orgullo étnico cultural; sentido de independencia muy profundo, control del ciclo productivo y del mercado; capacidad de adaptación, mentalidad innovadora; constituyen el mayor legado de sus antepasados.

Cirugía constitucional

Las leyes se deben elaborar con inteligencia y sabiduría, para que su vigencia dure mucho tiempo; más aún la Constitución, que es la ley suprema de una nación, debe ser de vigencia casi perpetua. Esa fue la razón, para que los promotores de la Constitución de 2008, proclamen sin temor alguno que duraría unos trescientos años. Obviamente que una carta magna puede tener imprecisiones, pero estos deben ser evacuados con el tiempo y con la mesura de un cirujano, siguiendo todos los procedimientos legales y éticos, que como texto político sagrado lo demanda.

A lo largo de la historia en nuestro país, la Constitución ecuatoriana, se ha editado en unas 20 ocasiones, muchas veces, respondiendo a los intereses de personajes y grupos de poder, que se han turnado en el gobierno. Con la última constituyente se esperaba que esta realidad histórica cambie, pero lamentablemente podemos constatar que esto no va a suceder, pues desde el ejecutivo se ha ordenado la reforma de una serie de ítems, vía trámite parlamentario, que de alguna forma deslegitimaría la Constitución vigente, que aprobamos con una amplia mayoría en las urnas, los ecuatorianos.

Manipular las leyes y al electorado para lograr un éxito político, no es bajo ningún modo algo ético; más aún si se quiere alterar una Constitución de manera estructural. No se puede atribuir al electorado ecuatoriano, una ingenuidad infantil, como para ocultar que en el tema de las reformas, el punto fundamental para el oficialismo, es el tema de la reelección indefinida para todas las funciones públicas del Estado. El oficialismo puede argumentar cualquier disparate jurídico para hacerlo vía Asamblea Nacional, que sabemos es sumisa al poder central; pero nuestro sentido común, nuestra visión de justicia, nos dice que temas tan delicados, que son de un impacto político y social tan profundos como estos, deben sujetarse a un análisis y debate nacional sin prejuicio alguno, previo sometimiento a un referéndum vinculante, de irrenunciable transparencia certificada. Si no, sencillamente estaríamos cayendo en una dictadura solapada.

El despertar de los mandantes

El encanto del “Flautista de Hamelín” en la política ecuatoriana, parece que empieza a disiparse. La marcha de los trabajadores convocada por el Frente Unitario de Trabajadores FUT y otras organizaciones como la Conaie, del pasado miércoles 17 de septiembre, fue inédito y masivo en el actual periodo de la Revolución Ciudadana. Según reportes de los medios de comunicación, se dieron enfrentamientos violentos entre los manifestantes opositores a la política del gobierno central y miembros de la Policía Nacional, con un saldo de varios heridos y 84 detenciones. Cabe señalar que las manifestaciones pacíficas y el derecho a la resistencia, están consagradas en la Constitución de nuestro país; pero en estas circunstancias, mantener la calma y la cordura, se torna difícil por la intromisión de los miembros del orden público y los ánimos exaltados de los manifestantes.
Ventajosamente la cosa no pasó a mayores; dada la irresponsable convocatoria de parte del oficialismo a una contra marcha que se concentró en la Plaza de la Independencia, a unos cuantos metros de los marchantes opositores, que pudo haber originado una lamentable confrontación violenta entre hermanos ecuatorianos. El gobierno debe entender que aquí en nuestro país se debe gobernar para todos y no solo para una mitad, o peor aún para su grupo de amigos que están en el poder.

No somos ciegos para negar los logros de la actual administración, más que todo en la infraestructura pública, administración que ha sido bendecida con una inimaginable cantidad de recursos económicos, provenientes de esta segunda bonanza petrolera, que son de todas y todos los connacionales. Pero me parece que los logros de la “revolución”, son enturbiados por una serie de desaciertos que empiezan a molestar a las mayorías, como la metida de la mano a la justicia, la criminalización de la protesta social, la degradación de la libertad de expresión, el caudillismo, leyes inconsultas e impositivas, doble discurso, entre otros tantos errores encasillados bajo la lógica de una revolución centralista, vertical y autoritaria.

sábado, 13 de septiembre de 2014

“Chávez nuestro…”

Intentar salvar al gobierno chavista de Maduro con un ¡Chávez nuestro que estás en los cielos..!, delata la clase de gente que está gobernando Venezuela. A renglón del articulista venezolano Gustavo Briceño “Es la difamación del nombre de un dios. Significa pues, que un determinado colectivo, al expresar que Chávez es nuestro y que está en los cielos, intenta asemejar al presidente fallecido con Dios. Es en toda su extensión una inmensa blasfemia y de paso, una manifestación de locura colectiva”.

Lejos de nuestra afinidad política o no, con el llamado Socialismo del Siglo XXI, lo que ocurre en Venezuela, es a todas luces un experimento populista que ha puesto al país al borde del abismo; citando nuevamente a Briceño: “Hugo Chávez Frías ha sido el presidente de Venezuela más nefasto que ha pasado por nuestra historia, desde que Venezuela apareció frente al mundo como una república. Chávez hizo lo que un presidente sano y racional no hubiera hecho jamás en un país como el que tenemos: dividir a los venezolanos y anarquizarlos por el solo capricho de destruir una sociedad que odió y nunca entendió”.

Hacer un buen gobierno no significa encender una bronca generalizada dentro de una sociedad, llenar las cárceles, perseguir a sus detractores, mientras se reparte la vendimia de los petrodólares a diestra y siniestra, para luego quedar desfalcado. Dentro de los gobernantes socialistas en el mundo, han existido estadistas responsables que han optado por el pragmatismo social y económico, esto ha permitido a sus países, abrirse paso hacia un desarrollo democrático y sustentable. Aunque el concepto de populismo parece que todavía está en debate, podríamos resumirlo con el siguiente dicho popular: “Por la plata baila el mono, y por el oro el mono y el perro”, frase que alude al interés de la gente y los políticos por el dinero. Mientras se extiendan migajas, muchos pero no todos, incluso estarían dispuestos a vender el alma al diablo, o por lo menos a mantenerse callados.

sábado, 6 de septiembre de 2014

Historia idealizada

Al referirnos a nuestra historia, es evidente que pecamos de románticos e idealistas. Siempre ha sido así, nos vanagloriamos de las grandes hazañas de nuestros héroes míticos; y en el caso particular de las culturas indígenas o andinas, ingenuamente la hemos sobredimensionado como la perfección absoluta, en desmedro de la cultura dominante, a la que echamos la culpa de todos los males del mundo y la de nuestra propia desgracia.
Recojo algunas apreciaciones sobre los mitos y verdades del incario, según el blog: manifiesto bizantino. Señala por ejemplo que, uno de los mitos es que en el Tahuantinsuyo no existía la discriminación, cosa que dista de la realidad. Lo cierto es que la etnia inca, era una casta clasista y racista. Es común que cuando un Estado conquista a otro, el vencedor se crea superior. El Sapainca (emperador o rey de reyes), era quien como hijo del sol, garantizaba el orden de las cosas en la Tierra, como único intermediario entre el hombre y los dioses.

El poder inca marginó a muchos pueblos, por considerarlos peor que animales. Para la élite inca era inconcebible que un aristócrata se mezclara con alguien de menos estatus. Era una deshonra hacerlo, tan grande que para evitar la vergüenza, muchos optaron por quitarse la vida. Muchos estudiosos de los incas, han argumentado que en el pasado del Tahuantinsuyo no existió la esclavitud, cayendo en una verdad a medias, pues si hubo esclavitud, pero no del modo sistemático y organizado como en occidente. Los “pinas” por ejemplo, eran aquellos desafortunados, rebeldes y lacras sociales, que eran condenados a trabajar en los cocales oficiales en la selva, en condiciones de vida sumamente extremas.

La civilización inca fue el último aliento de toda la tradición andina milenaria, que se vio truncada con la llegada de los españoles. Muchos historiadores señalan con razón, que se estaba gestando una especie de sistema feudal muy primario, que posiblemente se hubiese concretado con características propias, si los peninsulares seguían aislados al otro lado del mundo.

viernes, 29 de agosto de 2014

Venciendo prejuicios

Era como las dos de la mañana de un fin de semana cualquiera, en la ciudad de Otavalo de hace aproximadamente un cuarto de siglo, venía en mi motocicleta en una de mis andanzas juveniles, cerca de la Plaza de los Ponchos, distingo a otro muchacho indígena que me hace parar con insistencia, me detengo, sin mayores explicaciones se monta en mi moto, yo entiendo y arranco enseguida. El “pana” había sido de Peguche, comunidad cercana a Otavalo. Después de varios años me encontré con este “compañero”, ya en una situación tranquila me explicó de aquel incidente. Resulta según me dijo, que una jorga de mestizos lo había acorralado de esquina a esquina para agredirlo, y que yo había llegado justo en el momento preciso; recuerdo que el agradecimiento hacia mí, fue emotivo y sincero.

La clásica y tradicional canción del grupo Winiaypa, titulada Chuchaqui, que por cierto es una de las mejores fusiones kichwas con ritmos contemporáneos, cuenta otro de los tantos incidentes étnicos entre indígenas y mestizos, que era muy común hace unas dos décadas. Muy a menudo al encontrarse con un grupo de muchachos mestizos, sin razón alguna lanzaban improperios a los indígenas, como: “indios”, “longos”, “roscas”, entre otros. Las relaciones entre los indígenas que empezaban a tomarse Otavalo y cierto sector de mestizos reaccionarios eran tensas. Recordemos que en 1996, Verónica Barahona, chica indígena que pretendía participar en la elección de la Reina del Yamor, fue rechazada contra todo razonamiento, por razones étnicas. Por esas mismas fechas las autoridades municipales de ese entonces, pretendieron sacar el monumento a Rumiñahui del parque central, sin conseguirlo.

Indudablemente el ascenso de Mario Conejo a la alcaldía de Otavalo, inauguró un nuevo periodo dentro de las relaciones interétnicas en la ciudad, y podemos decir que hemos avanzado. En mi caso por ejemplo a más de la fluida vida social entre amigos y familiares “runas” dentro de la ciudad, tengo muchos amigos mestizos con quienes hemos compartido alegrías y tristezas dentro de una sincera camaradería.

sábado, 23 de agosto de 2014

Entorno violento

He llegado a la conclusión de que la violencia lastimosamente es algo inherente a la naturaleza humana. Además sin necesidad de justificarla, debo presumir que nuestro mundo es violento, que nuestra galaxia y el universo mismo es violento. El micro cosmos es una eterna batalla bacteriológica y de violentas colisiones subatómicas. En tal sentido los que osamos estar vivos en esta fracción de segundo cósmico, somos naturalmente unos supervivientes. Existe evidencia de que el ser humano es igual o más violento que sus antepasados de la antigüedad, por hoy con una maquinaria más sofisticada para hacer daño al prójimo. Por más religiosos y pacifistas que nos declaremos, siempre tendremos impregnado en nuestra memoria, algún desliz violento en nuestras vidas, eso es innegable.

Dentro de esta cruda realidad también se percibe tenue, la luz de la sensatez y la búsqueda de la paz, destinada a eliminar el sufrimiento, como un acto altruista de la inteligencia humana. En diferentes épocas de la historia de la humanidad, han aparecido mensajeros de la paz o profetas que nos han inducido hacia esa paz y convivencia fraterna, que todos necesitamos pero que no la podemos establecer a cabalidad. Por ejemplo nadie olvida el mensaje de paz que advirtió  Jesús el Galileo. También es cierto  que el tema religioso ha sido conflicto de sangrientas batallas y de apasionadas discusiones, que pone en entredicho el propósito mismo de una fe religiosa.

Cierto es que la política y la religión establecen los parámetros legales y morales, para establecer una convivencia pacífica que nunca se ha logrado en su totalidad; de ahí que estos temas son de un debate un tanto conflictivo, que muchos prefieren evitarlos. Sin embargo cabe señalar que por hoy son los únicos caminos tendientes a conseguir un equilibrio aceptable de correlacionarnos en nuestro entorno y el mundo; por eso la necesidad de líderes religiosos y políticos que sepan sobrellevar el yo violento interior que todos tenemos, enjaulado en las rejas de la paz colectiva, que es lo que cuenta más.

     

miércoles, 20 de agosto de 2014

La diminuta humanidad

Con la muerte de nuestro cuerpo físico, evidentemente el universo conocido llegaría a su fin para cada uno de nosotros. Absolutamente en todas las culturas del mundo, se ha especulado sobre el origen y la razón de la existencia humana, y dentro de esta eterna búsqueda que calme nuestra crisis existencial como seres racionales, está la búsqueda de un ser absoluto llamado dios, el responsable de nuestra existencia y destino final. Muchos creen haber develado ese misterio y proclaman una suerte de verdad absoluta a sus creencias, para así  poder regocijarse y encontrar cierta paz interior. La religión y la espiritualidad son necesarias para los pueblos, casi imprescindibles, en la medida que establece una convivencia social aceptable a través  de sus valores morales. Pero esas creencias no deberían contraponerse al conocimiento y las ciencias, como ocurrió en la Edad Media, sino deberían buscar por lo menos una mínima confluencia que evite un profundo conflicto filosófico. El entendimiento entre ciencia y religión parece algo desnaturalizado por sus particulares principios. Vaya dilema.

Adentrarnos en el conocimiento del cosmos y sus misterios, nos eleva más allá de nuestras creencias religiosas, para convertir al dios de los humanos en algo diminuto e intrascendente. Nuestro planeta azul, apenas es un puntito extremadamente diminuto en la Vía Láctea, nuestra galaxia. Suponiendo que se podría viajar a la velocidad de la luz, que es de 300 mil kilómetros por segundo, necesitaríamos 27 mil años de constante viaje, solo para llegar a la mitad de nuestra galaxia, y de esas galaxias existirían aproximadamente unos 100 mil millones solo en el universo observable. Esto hablando de cuerpos celestes, pero el universo tiene misterios casi incomprensibles a la mente humana. El espacio que se consideraba como algo vacío, ahora se sabe que contiene la mayor parte de la materia del universo, conformada por radiación electromagnética, partículas cósmicas, neutrinos sin masa e incluso formas de materia oscura y la energía oscura.

Muchas de las verdades científicas de antaño se derrumban con el avance del conocimiento humano. Por ejemplo siempre se dijo que la distancia entre dos puntos es la recta, hoy se especula incluso que el espacio cósmico se puede torcer para acortar la distancia de esos dos puntos. Los misteriosos agujeros negros galácticos tienen una gravedad inimaginable que podría comprimir todo el planeta tierra al tamaño de una papa. Si nos adentramos al micro cosmos, la física cuántica hoy nos hace dudar de lo que nosotros conocemos como realidad, incluso pone en entredicho la teoría del origen del universo, este podría remontarse más allá del Big Bang. La mente humana es la mutación más maravillosa del todo, por poseer conciencia, es un milagro de nuestro universo conocido. A pesar de la insignificancia en el cosmos, la vida humana está llamada a trascender en el universo, a evitar su destrucción, a buscar los medios y la tecnología para nuestra supervivencia o morir en el intento; si no logramos este cometido, ¿de qué nos  serviría el altruismo espiritual, nuestra veneración a la madre tierra, o a aquel Dios omnipotente? Mientras tanto flotamos cual frágil burbuja en el espacio. 

Ejemplo Curitiba

La ciudad brasileña de Curitiba, debería ser la inspiración para todas las autoridades municipales y de quienes sueñan con una ciudad modelo. Curitiba la capital del estado brasileño de Paraná, es una metrópoli de nivel internacional, donde sus índices de desarrollo humano y económico, hablan por sí solos. El modelo de gestión de la trasportación urbana es reconocido a nivel mundial y no es raro ver a funcionarios de todas partes del mundo que visitan la urbe, interesados en su afamado modelo, que ya lo han puesto en práctica ciudades como Los Ángeles y Nueva York. Es conocido que en esta ciudad, todo es ordenado; por ejemplo las estaciones de taxis están separadas en forma adecuada y estos no paran en cualquier esquina, a no ser que sea una emergencia. Aquí en verdad se respeta al peatón, sin importar que sea un niño, adulto o mayor. A esto se suma sus atractivos culturales y turísticos como el Jardín Botánico de Curitiba o la Ópera de Alambre, entre tantos otros que provocan la visita de 300 mil turistas al año.

Sus habitantes se enorgullecen de esas preferencias que han logrado a través de una adecuada administración pública y también con el impulso de organizaciones privadas. Otro orgullo de esta ciudad cosmopolita está en sus espacios verdes, cada habitante tiene un espacio verde de 52 metros cuadrados, que va más allá de lo que pide las Naciones Unidas, que es de 15 metros cuadrados. Existen más de 144 km de espacios para bicicletas bien respetadas y bien utilizadas. Pero sobre todo esto, es la amabilidad de su gente, la que le hace destacar incluso por sobre las ciudades europeas.

Aquí más cerca, en Otavalo, tenemos una ciudad con un gran potencial de proyección, solamente hace falta una cosa: sintonía visionaria entre autoridades, ciudadanía y comunidades. Ejemplos como la de Curitiba en Brasil o Santa Fe en Nuevo México Estados Unidos, son de mucha valía a la hora de trazarnos una hoja ruta, para nuestra ciudad y sus comunidades. Es hora de mirar más allá del horizonte inmediato. 

lunes, 4 de agosto de 2014

Fierros infernales

Una carnicería como la que está sucediendo en la Franja de Gaza, dentro del conflicto palestino-israelí, debe ser condenada sin vacilación alguna. Pero parece que los intereses políticos regionales y geopolíticos, priman más que el valor de la vida humana, esto ante la impávida expectación de los organismos y países llamados a hacer respetar un alto al fuego inmediato. En este conflicto de complejidad muy extensa, es fácil llevarse por nuestra emotividad ideológica y maldecir al “cuco” sanguinario del Estado de Israel o a las milicias extremistas del grupo Hamas. En una guerra todos son asesinos, pero en perspectiva de cada bando, son luchadores y patriotas que gozarán incluso del beneplácito de sus dioses. Aquí nuestro enemigo general debería ser la guerra y quienes pregonan por ella, la dirigencia de los dos bandos, a las que no ha importado en absoluto poner a civiles e incluso niños en la mira de sus fierros infernales. 
     
El arsenal nuclear de la Guerra  Fría sigue intacto y el peligro de una aniquilación en términos globales también. El guía supremo iraní, el ayatola Ali Jamenei, acusó a Israel de estar cometiendo un “genocidio” en Gaza y pidió al mundo islámico que arme a los palestinos para luchar contra el “régimen sionista”. Si esto sucede –como muchos lo querrán- el polvorín del Medio Oriente podría explotar afectando incluso la paz global, en un mundo en que los nacionalismos belicosos parecen resurgir nuevamente. El presidente estadounidense Barack Obama ha declarado que cualquier solución a largo plazo del conflicto pasaría por “desarmar a los grupos terroristas y desmilitarizar Gaza”. Obviamente a Israel y occidente no le interesa el establecimiento de un Estado Palestino, y los palestinos con todo su derecho histórico, tampoco renunciarán a su patria; tornando aquel conflicto a su punto inicial.


En cualquier tipo de conflictos bélicos y más que todo en los conflictos internacionales el papel protagónico de la ONU en la búsqueda de una solución inmediata, debe ser inexcusablemente protagónico. Esperemos que las mentes de los líderes mundiales se “iluminen” y que puedan dirimir con sabiduría en esta clase de conflictos. 

La diminuta humanidad

Con la muerte de nuestro cuerpo físico, evidentemente el universo conocido llegaría a su fin para cada uno de nosotros. Absolutamente en todas las culturas del mundo, se ha especulado sobre el origen y la razón de la existencia humana, y dentro de esta eterna búsqueda que calme nuestra crisis existencial como seres racionales, está la búsqueda de un ser absoluto llamado dios, el responsable de nuestra existencia y destino final. Muchos creen haber develado ese misterio y proclaman una suerte de verdad absoluta a sus creencias, para así  poder regocijarse y encontrar cierta paz interior. La religión y la espiritualidad son necesarias para los pueblos, casi imprescindibles, en la medida que establece una convivencia social aceptable a través  de sus valores morales. Pero esas creencias no deberían contraponerse al conocimiento y las ciencias, como ocurrió en la Edad Media, sino deberían buscar por lo menos una mínima confluencia que evite un profundo conflicto filosófico. El entendimiento entre ciencia y religión parece algo desnaturalizado por sus particulares principios. Vaya dilema.

Adentrarnos en el conocimiento del cosmos y sus misterios, nos eleva más allá de nuestras creencias religiosas, para convertir al dios de los humanos en algo diminuto e intrascendente. Nuestro planeta azul, apenas es un puntito extremadamente diminuto en la Vía Láctea, nuestra galaxia. Suponiendo que se podría viajar a la velocidad de la luz, que es de 300 mil kilómetros por segundo, necesitaríamos 27 mil años de constante viaje, solo para llegar a la mitad de nuestra galaxia, y de esas galaxias existirían aproximadamente unos 100 mil millones solo en el universo observable. Esto hablando de cuerpos celestes, pero el universo tiene misterios casi incomprensibles a la mente humana. El espacio que se consideraba como algo vacío, ahora se sabe que contiene la mayor parte de la materia del universo, conformada por radiación electromagnética, partículas cósmicas, neutrinos sin masa e incluso formas de materia oscura y la energía oscura.

Muchas de las verdades científicas de antaño se derrumban con el avance del conocimiento humano. Por ejemplo siempre se dijo que la distancia entre dos puntos es la recta, hoy se especula incluso que el espacio cósmico se puede torcer para acortar la distancia de esos dos puntos. Los misteriosos agujeros negros galácticos tienen una gravedad inimaginable que podría comprimir todo el planeta tierra al tamaño de una papa. Si nos adentramos al micro cosmos, la física cuántica hoy nos hace dudar de lo que nosotros conocemos como realidad, incluso pone en entredicho la teoría del origen del universo, este podría remontarse más allá del Big Bang. La mente humana es la mutación más maravillosa del todo, por poseer conciencia, es un milagro de nuestro universo conocido. A pesar de la insignificancia en el cosmos, la vida humana está llamada a trascender en el universo, a evitar su destrucción, a buscar los medios y la tecnología para nuestra supervivencia o morir en el intento; si no logramos este cometido, ¿de qué nos  serviría el altruismo espiritual, nuestra veneración a la madre tierra, o a aquel Dios omnipotente? Mientras tanto flotamos cual frágil burbuja en el espacio. 

viernes, 25 de julio de 2014

¿Apartheid criollo?

El tristemente célebre régimen de apartheid sudafricano, fue un sistema de segregación racial que llenó de vergüenza a la humanidad, hasta 1992. Básicamente consistía en la separación de lugares exclusivos para blancos y otro para negros, bajo el dominio total de la élite blanca de Sudáfrica. Ciudades, escuelas, autobuses, playas, baños, para blancos y otros separados para negros; los segundos no tenían ni el derecho a voto y estaban sujetos incluso a la prohibición de amarse si no son del mismo grupo “racial”. En esta parte vale recordar que solo existe una raza, la raza humana.

En 1996, en Otavalo se produjo un conflicto social e incluso jurídico, porque las autoridades municipales de ese entonces no permitieron participar a una candidata indígena en la elección a Reina del Yamor. Por aquel entonces se argumentó que el Yamor –que tiene elementos autóctonos-  con la elección de la  reina, era una fiesta de mestizos para mestizos,  y que para el “indigenado” estaba reservado la elección de la Sara Ñusta. Desde esa fecha no se topó más el tema, a pesar de que inmediatamente al suceso, se dio un fallo constitucional en el sentido de que este impedimento era inconstitucional, favoreciendo, como no podía ser de otra manera al sector indígena. Después llegó un alcalde supuestamente indígena, a quien más allá de su discurso de la interculturalidad, nunca le interesó democratizar estos espacios que de alguna forma representaban, rezagos coloniales de dominación.

Personalmente suponía que la elección de la Reina del Yamor, estaba abierta a todas las chicas bonitas e inteligentes, que la no participación de kichwas, más bien era por el desinterés de ese sector; lamento decir que he estado equivocado. Hoy entiendo que por “tradición”, una “comisión” según el gusto y afinidad de esta, es la encargada de seleccionar a las candidatas. Pues bien desde el Cabildo Kichwa de Otavalo, hacemos un pedido público, que este escogimiento no tenga sesgos “raciales”. Para esto se prevé presentar tres propuestas, tres precandidatas kichwas al Comité de las fiestas del Yamor 2014, para que sean tomadas en cuenta. El reto de ir construyendo una verdadera interculturalidad, es una tarea de todos.

viernes, 18 de julio de 2014

Ideologías contrapuestas

El orden mundial o el statu quo global, basado en la libertad y el capitalismo, dista mucho de ser justo y democrático, por  ejemplo es conocido el papel que desempeñan las grandes corporaciones en la política de las superpotencias. El 1% de la población mundial acapara la mitad de la riqueza a escala planetaria. Con tantas necesidades, el mundo gasta 1,8 billones dólares al año en armamento. Esto realmente es una locura, cuando existen niños muriéndose de hambre y enfermedades por todas partes. Definitivamente esto no se acerca al ideal de justicia que tiene la humanidad. Por otro lado al unísono consigna revolucionaria, tendiente a remediar estas injusticias en el mundo, se ha planteado la antítesis ideológica basada en teorías contrapuestas al  modelo liberal de la democracia occidental, que como se ha podido comprobar, resultó un remedio peor que la enfermedad. No se duda de las buenas intenciones que hubo, desde los inicios mismos del marxismo, por cambiar ese orden mundial que pone al capital por encima del ser humano. Pero el sendero trazado por el espíritu revolucionario no era el correcto, se contraponía a la naturaleza del espíritu humano; la dignidad, el libre albedrío y la individualidad, se sintieron afectados, y en consecuencia el bloque socialista, cayó estrepitosa y simbólicamente con la demolición del Muro de Berlín en 1989.

Recuerdos de los experimentos revolucionarios de la época de la guerra fría, sobran, como el caso de Camboya, que en la segunda mitad de la década del 70, bajo el dominio de los Jemeres rojos con Pol Pot a la cabeza, murieron cerca de dos millones de personas en el denominado genocidio camboyano. Época en la que el hecho de vivir en una ciudad le convertía a un ciudadano, en un potencial peligro para el Estado; se dice que incluso el uso del pronombre personal yo, fue prohibido en pro de un colectivismo demencial. Los horrores de la guerra y las posturas ideológicas intrascendentes siguen al orden del día en distintas regiones del mundo, como en el caso palestino-israelí. Una lluvia de bombas y de sangre de nunca acabar.  

domingo, 13 de julio de 2014

Ganado y burocracia

A las cinco y media de la madrugada, de un día sábado cualquiera, es normal encontrarse con grupos de turistas extranjeros de diversas nacionalidades y edades, que apurados caminan por la vías que conducen al “mercado de animales” de Otavalo; otros se detienen para preguntar sobre las referencias de este sitio, que al igual que en otros espacios de la serranía, es un hormiguero multicolor de gran atracción, en especial para los visitantes de latitudes distantes. Recuerdo que hace ya varios años, en mi periplo por el altiplano peruano, incluso quien esto escribe, quedó fascinado ante un gentío colorido, de trajes llamativos y vistosos animales que irrumpían aquel espacio verde, en un pueblito cualquiera cerca de Cusco. Era pues una escena tradicional y muy propia de los pueblos andinos.

La decisión de los funcionarios de Agrocalidad, de clausurar la feria de animales de la ciudad de Otavalo, llama mucha la atención, por inesperada. Entiendo que esta clausura pesa sobre la municipalidad de Otavalo y por lo tanto es injusto y viene a destiempo. Es injusto porque los perjudicados de esta decisión burocrática, son los comerciantes que participan y subsisten de esta tradicional feria, que nada o poco tienen que ver con las adecuaciones del lugar. Por otro lado viene a destiempo porque las autoridades actuales del Municipio, recién acaban de posesionarse en sus flamantes puestos, y al igual que los usuarios de este mercado, se absuelven de responsabilidad.

Desesperados, en esta semana, los usuarios de este espacio se han reunido con los funcionarios municipales, para buscar soluciones urgentes a este problema que tiene incidencia social y turística. La solución es razonable y viable: Uno, los funcionarios de Agrocalidad deben rever  de manera urgente la decisión tomada. Dos, deben extender un plazo razonable para que las nuevas autoridades planifiquen la reubicación adecuada de este centro de comercio pecuario. El trabajo honesto y esforzado de la gente del pueblo, no puede detenerse por tecnicismos burocráticos, peor aún por diferencias políticas de terceros.

martes, 8 de julio de 2014

“Dígame licenciado"

“Dígame licenciado”- “licenciado”-“gracias, muchas gracias”, son frases muy conocidas de la popular serie televisiva humorística “Los Chifladitos”, del mexicano Roberto Gómez Bolaños, más conocido como Chespirito. Hago esta colación con el afán de hacer notar, que esto de usar y personificar los títulos académicos en forma indiscriminada, podría responder a un complejo psicológico de amplio análisis. Estimo que se los usa, para presumir de inteligente y estudiado, para pretender posesionarse por encima de los demás. La misma intención delata muy poca inteligencia y un profundo sentimiento de inferioridad y baja autoestima.

Antes, en tiempos arcaicos, hablo de hace 30 o 40 años, el uso de títulos académicos como pronombres, debió ser algo normal por excepcional. Entiendo que esta costumbre por hoy se remite a lo pueblero y provinciano; no sorprende encontrar todavía, una letanía de licenciados, ingenieros y abogados, hasta en un “parte mortuorio”. Esta situación contrasta hoy, cuando las sociedades evolucionan hacia una convivencia igualitaria, el respeto a las diferencias culturales, la prohibición absoluta a cualquier tipo de discriminación social. Es de notar que particularmente en países anglosajones y más acá en prestigiosas universidades, el trato por ejemplo entre alumnos y profesores, es de igual a igual, como debería ser en todo lado.


Los títulos académicos sirven para presentarse a un trabajo y nada más, ni siquiera para colgarlos en la sala; me atrevería a decir que a veces ni siquiera para presentarse a un trabajo, pues aunque el título es un respaldo, no garantiza el dominio de destrezas en la supuesta especialización. Conocido es el dicho: “Hay genios sin educación primaria, y pendejos con doctorado”. Alguien muy sabiamente dijo que, después de la universidad, uno realmente empieza a aprender, y el aprendizaje no tiene plazo, es continuo y permanente. Si uno de los grandes sabios griegos de la antigüedad, Sócrates, dijo: “Solo sé, que nada sé”, ¿por qué deberíamos ir presumiendo nuestro título académico colgado en nuestro pecho?

martes, 1 de julio de 2014

Resistencias al autoritarismo

Me he tomado el atrevimiento de sacar algunos extractos de la investigación periodística de Eduardo Tamayo G., realizada en 1994 y que se titula: “Resistencias al autoritarismo”. La obra es un compendio del periodo presidencial socialcristiano, comprendido entre 1984 y 1988, liderado por el guayaquileño León Febres Cordero Rivadeneira, quién en esa época fue llamado acertadamente como el “dueño del país”. La mayoría de los jóvenes de hoy, ni siquiera habían nacido en esa época, y estimo que poco o nada conocen de lo que aconteció en este periodo, caracterizado por una confrontación política muy violenta.

“La acción represiva del febrescorderismo se dirige también contra la prensa de oposición, y contra los periodistas en general, por el delito de informar lo que pasaba en el país. Esta situación se produce, paradójicamente, cuando el régimen se proclamaba como “el campeón de la libertad de expresión”…” “Los periodistas, columnistas y medios no solo que tienen dificultades para cumplir con su trabajo –es frecuente que policías, militares y diputados gobiernistas agredan a reporteros- sino que serán objeto de persecución y retaliaciones.”

“Así por ejemplo, los articulistas del diario Hoy: Juan Cueva, Simón Espinosa y Patricio Moncayo son despedidos de sus puestos en el sector público por “escribir en la oposición”. El editor de la controvertida revista Censura, Pancho Jácome, es detenido y torturado, en una oficina contigua a la Gobernación de Guayas, según su denuncia. Varios periodistas son separados de los medios de información por presiones oficiales. Se clausuran las emisoras Democracia de Quito, y CRE, Huancavilca y Centenario de Guayaquil, por transmitir declaraciones de Abdalá Bucaram, consideradas ofensivas para el presidente de la República.”


“El Gobierno desde el principio, no le reconoce al Frente Unitario de Trabajadores, FUT, su condición de interlocutor social. Su política hacia el movimiento sindical no se sustenta en el diálogo sino en la confrontación directa, la represión y las acusaciones de subversión a los trabajadores.” Cualquier parecido con la realidad actual, es pura coincidencia.

viernes, 20 de junio de 2014

Solsticio y celebración

Mañana 21 de junio, con el solsticio de verano, comienza oficialmente la celebración más importante de los pueblos andinos, el Inti Raymi, conocida en el norte ecuatoriano como la fiesta del sol, sanjuanes o San Pedro. Pero primero repasemos qué es un solsticio; es el momento en que el sol toma una posición más cercana al hemisferio norte de nuestro planeta, debido a la inclinación del eje de la Tierra. En esta fecha el sol, al momento de salir toma su posición más cercana al norte para regresar nuevamente con dirección sur, pero esto es sólo una ilusión, pues en realidad el sol no se mueve, sino nuestro planeta alrededor del astro rey.

Nuestros antepasados al igual que otros pueblos del mundo, tenían un conocimiento astronómico muy exacto, que marcaba un calendario más perfecto que el calendario occidental gregoriano. La vida,  la agricultura, la religiosidad y las festividades gravitaban alrededor de este conocimiento. Por hoy esta festividad sobrevive con distintos matices, dada la influencia del cristianismo y el avance de la globalización que de alguna forma va mermando en su real dimensión, el significado de esta mística celebración.


En Imbabura y las regiones cercanas, se ofrece por hoy, una amplia y variada programación con motivo del Inti Raymi; esta fiesta se amplió de las comunidades rurales para tomarse las ciudades, como Ibarra, Atuntaqui, Otavalo, Cayambe, Tulcán, entre otras; y con los kichwas otavalos, países y ciudades aún más lejanos. Congratula también saber, el interés y el apoyo de las autoridades provinciales, cantonales, centros educativos; que cada vez se integran con más compromiso. El Inti Raymi representa ese legado cultural que tenemos todos los ecuatorianos y por lo tanto debería ser considerada fiesta nacional y gozar el estatus de feriado; es contradictorio que por hoy nuestros niños y jóvenes tengan que desprenderse de esta fiesta, para asumir clases y exámenes en los centros educativos. 

domingo, 15 de junio de 2014

Neptuno y Machángara

La conquista española significó para los pueblos originarios de América, muerte, destrucción y la aniquilación cultural. La religiosidad nativa fue remplazada a sangre y fuego, por el credo católico. Las wakas –sitios sagrados- más significativas de esos pueblos subyugados, fueron tomados a cruz y espada, para ser transformados  en santuarios de extraños seres blancos, que aparecieron de un momento a otro, como dueños y divinidades de la nueva religiosidad, a la que los estudiosos sociales le llamaron sincretismo religioso; una especie de mezcla religiosa que reconfiguró un catolicismo diferente a la practicada en Europa. 

Así se explica la cantidad de vírgenes -imágenes de la virgen María- que aparecieron en la América pos colombina; como por ejemplo la virgen del Quinche, la virgen del Cisne, la Churona, la virgen de Las Lajas, la virgen de Guadalupe, entre tantas otras. Imágenes que cuentan un aparecimiento mítico y misterioso, por lo general en sitios que antiguamente eran una waka. Cuando estas imágenes anualmente, convocan a miles y miles de feligreses “católicos”, lo que en realidad sucede es una expresión clara y auténtica de la religiosidad propia de los pueblos autóctonos que creen en las divinidades de la naturaleza, de la pachamama, de la paridad y la complementariedad.

En Otavalo, dentro de la urbe, pasó desapercibido, olvidado y encadenado, uno de los sitios de ritualidad más importantes de la zona, como es el socavón del Machángara, donde también existe una imagen de la virgen María. Antropólogos y expertos en el tema, podrían disertar horas y horas, sobre el simbolismo y la importancia que tiene este sitio, en la espiritualidad y el culto astronómico. Paradójicamente junto a este sitio sagrado, descuidado; se encuentran las piscinas del Neptuno -un nombre extraño-, en la que el municipio invirtió mucho dinero en restaurarla. Ante el olvido y hundimiento del Machángara, restauraron a Neptuno –el dios romano del agua-. Estas son las incongruencias culturales, que destapa la coronilla de nuestras autoridades.

Una sola raza

Categóricamente solo existe una sola raza. ¿Entonces cabe hablar de racismo como un fenómeno social?, sí y no, sería la respuesta. No, porque el término racismo tiene su origen en la palabra raza y en la falsa creencia de que la humanidad se divide en razas. Hoy se sabe que solo existe una sola raza, la raza humana; entonces por ese lado el “racismo” es un término que está de sobra en el diccionario social. Por otro lado este término se ha afianzado tanto en el diccionario popular, para denotar sentimientos etnocéntricos de un grupo humano, en menosprecio de otros que fisiológica y culturalmente son diferentes.

Los países de la región andina albergan en su seno una población que se identifica claramente como mestiza, y esa es la identidad que incluso a regañadientes se ha aceptado en  forma general, como parte sustancial de la “cultura nacional”. En países como Perú, Bolivia y Ecuador, podemos afirmar sin temor alguno, que son latitudes, donde la población mayoritaria es indígena, aunque los mismos se aferren a esconderlo; para corroborar esta situación, basta un pequeño estudio de características fisonómicas y culturales de sus habitantes.

¿Entonces porqué ese afán de querer ser, lo que no son? La respuesta se esconde en el doloroso proceso de la conquista y el colonialismo europeo, que sufrió nuestra América nativa, hace varias centurias; donde el hombre blanco europeo a expensas de cierto desarrollo tecnológico, se erigió vencedor como el amo y señor del mundo, para esclavizar, explotar y dominar. El racismo se convirtió en doctrina y se impregnó en lo más profundo del ser, el ideal del hombre inteligente y triunfador era blanco. Todos querían ser blancos. 

Curioso y despreciable aún más, que en países como el nuestro, los mismos que, hace tres o cuatro generaciones eran “naturales” identificados, hoy quieran pasarse de mestizos o blancos y te descalifiquen con actitudes racistas. El racismo o etnicismo, una tragedia humana tan presente en “civilizaciones de  primera línea”, como Italia y Estados Unidos; qué pena.


domingo, 1 de junio de 2014

Mi abuelo


Mi abuelo paterno Miguel, de estatura mediana y piel más blanca que cobriza, era una especie de alquimista andino. En su casa de tapial y teja, en el sector Chimbaloma de la comunidad de Agato, se dedicaba a un sinfín de actividades, como; tejeduría, agricultura, trueque, comercio, escultura, espiritualidad, también curaba lesiones, torceduras y un sinfín de cosas. Además de inventor, tenía una serie de artefactos extraños entre ellas, piedras brillantes que según él, eran con las que jugaron la “chunkana” los “montes”, entre ellos el tayta Imbabura. Conocía fábulas e historias inimaginables, que nos recreaba junto a la “tullpa”, mientras mi abuela Josefina, hervía la sopa de coles con papas para la cena. Cuando habré tenido unos ocho años, del tronco de un árbol, sacó un vistoso caballito de madera, en que los chicos nos entreteníamos las tardes.

Como buen sabedor de la espiritualidad, tenía en su casa un cráneo, no uno cualquiera, sino de un pariente mismo, fallecido hace mucho. Aseguraba que su espíritu estaba presente y que se manifestaba de distintas formas, algunas veces en los sueños y otras en directo, al lanzar piedrecitas, silbar o hasta hablar en ciertas ocasiones. El motivo principal para que este resto sagrado esté en la casa, era la de cuidar el domicilio ante los ladrones, que eran tan “célebres” como los de ahora. Recuerdo como si fuese ayer, aquella apacible vida campestre, cuando ni siquiera la electricidad había llegado a nuestras casas, en medio de maizales de tallos enormes por doquier, que nos daba la impresión de estar en la “sacha”, la selva de los “yungas”.

Tristemente Miguel enviudó joven, después de hacer su vida sólo por un tiempo, se mudó a vivir con nosotros. Ya cerca de su ocaso, se convenció de que había tenido una revelación, estaba completamente convencido, que bajo su casa –que estaba sobre una tola- existía un tesoro ancestral muy valioso; no éramos quién para contradecir sus conocimientos y sabiduría. Por un tiempo se dedicó completamente a la labor de excavar, ante la extrañeza de sus hijos y nietos. Al no haber acumulado riqueza alguna, la idea de él era, dejarnos algún legado material.      

miércoles, 28 de mayo de 2014

Kuntur

El cóndor andino es una de las aves más emblemáticas de Suramérica y de una particularidad muy especial dentro de la dimensión  simbólica de los pueblos originarios. Desde tiempos muy lejanos esta majestuosa ave de vuelo infinito, ha fascinado no solo a los pueblos indígenas que han visto en su personalidad, sabiduría y un nexo divino, convirtiéndolo en algo sagrado, sino que también ha fascinado a las naciones pos colombinas, las que adaptaron su imagen a las insignias de sus países, resaltando la majestuosidad, el poder y la inmortalidad de sus Estados. La palabra cóndor se origina etimológicamente de la palabra kichwa, kuntur; aunque en taxonomía se lo conozca como Vultur gryphus, no se lo puede asociar al cóndor con un buitre depredador, pues en realidad es un animal carroñero perteneciente a la familia de los Catártidos, término derivado del griego kathartes que significa “el que limpia”, refiriéndose justamente a sus hábitos carroñeros de consumir animales muertos.

Mucho se ha hablado también del reencuentro de los pueblos originarios de Norteamérica, representado en el águila calva y los pueblos nativos de Suramérica, representado en el cóndor andino. La unión de estas aves representa la sintaxis filosófica de la América nativa, vigente al unísono y sintetizado en la creencia de que la naturaleza, el cosmos, es un ser vivo y activo. La sacralidad del cóndor ha estado presente por milenios, así lo corroboran restos arqueológicos, como los monolitos de Tiwanaku en Bolivia y tantos otros; sacralidad que seguirá vigente mientras esta ave siga sobreviviendo a la agresividad y al arrinconamiento que ha obligado el ser humano.

Anteayer fue liberado en el Parque Cóndor de Otavalo, “Polito”, un cóndor  instrumentado con un rastreador satelital, que permitirá determinar su ubicación exacta, rutas de vuelo y sitios de descanso. Es el segundo en ser liberado y representa un gran esfuerzo por garantizar la no extinción de estos nobles animales; esperamos que no termine como el cóndor “Felipe”, aniquilado por un disparo de arma de fuego. Más respeto con esta mítica ave, de gran simbolismo nacional.

viernes, 16 de mayo de 2014

Un nuevo periodo

Efectivamente, con el alcalde Gustavo Pareja, hoy comienza una nueva administración municipal en Otavalo, que tendrá la duración de un lustro. Como ciudadanos y ciudadanas responsables, no nos queda más que desearle el mejor de los éxitos a la gestión de las nuevas autoridades, que se posesionaron el día de ayer. El reto sería como en cualquier relevo, superar positivamente a la administración anterior, puliendo las falencias que pudieron haber existido e implementando nuevas propuestas, propuestas viables y coherentes, que nos permita  marcar una hoja de ruta a largo plazo, para la ciudad de Otavalo y sus comunidades.

El quehacer político demanda mucha responsabilidad y es un tanto complicado, al estar involucrado la voluntad y el destino de todo un pueblo. Es necesario que las nuevas autoridades involucren en su gobierno, no solamente a gente capacitada, sino gente con aptitudes y actitudes probas, en el ámbito del trabajo y la administración pública. Por otro lado, también es necesario ya olvidarse de las viejas rencillas con sus rivales políticos, para centrarse en el trabajo orientado al beneficio del cantón. Se debe notar que ahora, la estructura física, económica y sociocultural de Otavalo, tiene una realidad diferente a la de 10 o 20 años atrás, y cualquier política pública, se debe encasillarse dentro de esa realidad.

En el cantón quedan pendientes muchos temas; pero básicamente el tema productivo y turístico, deberán ser tratados con prioridad y mucha responsabilidad, con un asesoramiento adecuado y una efectiva participación ciudadana. Recordemos también que el tema turístico se sustenta básicamente en la cultura y la ecología; bueno, en fin, el trabajo comienza ahora, esperamos que sea un trabajo participativo, propositivo; la buenas voluntades de manera desinteresada, las ofrecemos hoy en función de nuestro cantón. Estaremos atentos como siempre, divergentes a cualquier señal de retroceso. 

En la misma piedra

La Alemania nazi de 1939, con Adolfo Hitler a la cabeza, se había rearmado rápidamente  y además de la sed de venganza que tenía, por lo ocurrido durante la Primera Guerra Mundial, tenía intenciones más oscuras, como la de emerger a su nación, en un imperio absoluto en términos globales, que duraría mil años. La Segunda Guerra Mundial que finalizó nuevamente con la capitulación de Alemania en 1945, fue el conflicto militar más sanguinario que se haya registrado en la historia de la humanidad;  se involucró la mayor parte de las naciones del mundo, en especial las grandes potencias que tomaron partida en uno de los dos bandos: los Aliados con Inglaterra, Francia, URSS y Estados Unidos a la cabeza; y las Potencias del Eje con Alemania, Japón e Italia.

Se movilizó una cantidad increíble de recursos, sean estos bélicos, humanos, científicos y económicos, con más de 100 millones de militares puestos en acción. Se utilizó por primera y única vez, armas nucleares en un conflicto militar. El resultado fue macabro, un saldo de 50 a 70 millones de víctimas, destacándose en ello, los mártires judíos del holocausto nazi. Otro hubiese sido el destino de la humanidad, si la Alemania nazi y el imperio japonés, hubiesen logrado su cometido. Nadie sabe lo que hubiera ocurrido.

Cuando los Aliados llegaron victoriosos a Berlín a principios de mayo de 1945, los alemanes tuvieron que rendirse incondicionalmente ante americanos como también ante el ejército rojo. Rusia que pagó un alto precio en esta guerra, guarda en su memoria el 9 de mayo, como el Día de la Victoria. Ahora, parece que aquel conflicto de hace 70 años, toma vigencia nuevamente con el conflicto de Crimea en Ucrania; Rusia anuncia un desfile militar en la zona para este día, y la canciller alemana Angela Merkel, lamentó que el gobierno ruso tenga intenciones de instrumentalizar esta fecha, reviviendo viejas heridas entre estas dos naciones. Parece que no hemos sido capaces de aprender las grandes lecciones de la historia; bien dice el dicho, que el hombre es el único animal que se tropieza dos veces en la misma piedra. 

domingo, 4 de mayo de 2014

40 años

El 1 de mayo de 1974, se constituyó la Federación Indígena y campesina de Imbabura - FICI, como un espacio que recoge las necesidades de lucha y las voces reivindicativas de los pueblos y comunidades kichwas de la provincia de Imbabura; excluidas e invisibilizadas por el Estado Nacional, al igual que otros pueblos originarios de Ecuador y el Continente. El objetivo que se plantearon los líderes indígenas de esa época, era ni más ni menos que suprimir toda forma de explotación, opresión y discriminación racial, arrastrado por cinco siglos de colonialismo,  pregonando la construcción de una sociedad solidaria, comunitaria y humanista; así también la búsqueda del reconocimiento y el respeto a las diferencias culturales de los pueblos.

Fueron estas acciones y sumadas a otras que se realizaron paralelamente en otras provincias de país, que a mediados de la década de los ochenta del siglo pasado, posibilitaron la consolidación de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador CONAIE; que emerge como la voz principal de los pueblos indígenas del país, para consolidarse como uno de los actores más representativos en la vida política nacional. Cabe mencionar que la consolidación organizativa de los pueblos y nacionalidades originarias del Ecuador, no fue fácil ni sencilla, sino más bien respondió al cúmulo de luchas iniciadas por el mismo Rumiñahui, posteriormente por Fernando Daquilema y más que todo al trabajo organizativo realizado por lideresas como Dolores Cacuango y Tránsito Amaguaña. Papel protagónico digno de resaltar, fue la del imbabureño Monseñor Leónidas Proaño, conocido en la época como el “Obispo de los Indios”.

La Chijallta-FICI, hoy Federación de los Pueblos Kichwas de la Sierra Norte del Ecuador, a pesar de las desavenencias políticas y organizativas, después de 40 años, sigue vigente y es digno reconocer el trabajo realizado por sus sucesivos dirigentes, hombres y mujeres de lucha, que han marcado un  aporte histórico, en la búsqueda y construcción de una sociedad más justa y el verdadero Estado plurinacional.  

lunes, 28 de abril de 2014

Entre excrementos y orines

Al igual que todos los sábados, desde que tengo uso de razón, la Plaza de los Ponchos ha sido la vitrina de las manufacturas que realizamos en mi familia, desde tiempos inmemoriales. Es habitual que en ocasiones encontremos nuestros puestos de trabajo, lleno de botellas vacías, coletas de cigarrillos, sangre, vómitos y orines, por lo que siempre es oportuno llevar nuestros propios implementos de aseo. El último sábado, día mayor de feria, no era la excepción para esta inmundicia; por más limpieza que se hizo, tuvimos que soportar aquel olor nauseabundo por todo el día.

Es lamentable que aquel lugar tan turístico y afamado, considerado por algunos como patrimonio cultural, se haya convertido más que todo en la noche, en guarida de malandrines y bebedero de fin de semana. Para el colmo hace ya como un año, unos dos “dirigentuchos” de la plaza, con la venia de las autoridades ambientales y municipales, decidieron acabar con todos los árboles del sector, aduciendo que eran viejos y que representaban un peligro para propios y visitantes del lugar. La Plaza de los Ponchos lamentablemente está en decadencia, ni el auge revolucionario, ni los paquetes verde de la bonanza petrolera, han hecho caso de su agonía, profundizando su inexplicable mala racha. Para completar y evidenciar mis palabras, Otavalo no ha sido tomado en cuenta ni en una fracción de segundo, en el famoso y costoso video publicitario turístico mundial, llamado “All you need is Ecuador”.

En tiempos no muy lejanos Otavalo era una de los tres destinos turísticos más importantes del Ecuador, hoy ni siquiera aparecemos dentro de los diez primeros lugares de preferencia. Como comentaba una turista, aquí “están matando a la gallina de los huevos de oro”, a vista y paciencia de todos y todas. Ni las ocasionales visitas del presidente Correa a la Plaza, ni el ostentar tener una lugareña en la jefatura legislativa, ni haber tenido un “alcalde indígena”, bastaron para que alguien se sensibilice de esta penosa situación; porque ahí no se ha invertido ni una sola piedra, ni un solo centavo desde hace más de 40 años.  

Justicia o justicia

Hace poco en la provincia de Pastaza, en el Bloque 66 de la Amazonía ecuatoriana, dos contratistas de origen humilde que laboraban en un proyecto de agua potable, como parte de la empresa pública Ecuador Estratégico, fueron lanceados y asesinados por una familia waorani, que según parece sufrieron la muerte de un menor, por causas todavía no muy conocidas. El hecho indudablemente deja una estela de dolor en los deudos y familiares de estos dos trabajadores, que solo buscaban el pan para sus hijos.
Según la prensa el grupo waorani reaccionó de tal forma, luego de que un médico confirmara que su hijo llegó muerto, cuando lo llevaron a un centro de salud. Según voceros del gobierno, este grupo agresor no pertenece a poblaciones no contactadas, sino “son waos contactados y que han estado vinculados a los proyectos” de esta empresa.
Ahora el dilema es: ¿cómo se hace justicia en estos casos? Porque de hecho, sea cual fuere la situación o el lugar, la justicia debe primar en un Estado de derecho. Según la Constitución ecuatoriana, se reconoce a la justicia indígena como alternativa a la justicia ordinaria, sin especificar sus alcances, y de ahí surge el debate y la discusión, que la Asamblea Nacional debió hace tiempo haber discernido. La autonomía jurídica de los pueblos, nacionalidades y comunidades indígenas, es un logro importante; sin embargo es vulnerable a subjetividades en su aplicación y puede facilitar una impunidad desvergonzada. Recordemos el caso de una “violación” en Cayambe, donde el culpable solo fue bañado, según parece con flores.

Lejos de una fobia abierta hacia el derecho positivo, el derecho propio o llámese consuetudinario,  debe ser normado de alguna manera. En el caso de los waoranis involucrados en la pérdida de estas dos vidas, no sé si la cárcel o el azote sería lo más justo, pero si fuera un familiar de cualquiera de nosotros, no dudaríamos en pedir la más severa de las condenas, al final un asesinato es un asesinato.

lunes, 14 de abril de 2014

Electrizante

USD 660, es lo que costó un tablero eléctrico para seis medidores de una vivienda de un pariente en la ciudad de Otavalo. Al escuchar el precio del artefacto, al principio fui incrédulo y supuse que seguramente contenía medidores de “luz” de altísima tecnología. Electrizante fue después constatar, que en realidad ese era el precio del tablero –una caja metálica con alambres y breakers- y que además no contenía medidor alguno. Posteriormente, don Germán, el electricista de la familia, nos comentaba que la fabricación de estos tableros, obedecía a un “monopolio”, pues alguien tenía la exclusividad y la autorización de la empresa eléctrica para proveerla. Si realmente eso es verdad, consideraría que es un asunto poco ético y que tiene que ser remediado. Más allá de esta situación, parece que la empresa eléctrica Emelnorte, no camina acorde a los nuevos tiempos de “modernización” empresarial –me refiero a las empresas públicas- en la que la prioridad es la atención al cliente. Es fácil notar que dentro de la empresa, existen personas muy educadas que se esmeran por una buena atención, pero otros en cambio son pocos efectivos y parecería que sufren de alguna dolencia, no sé, tal vez algún tipo de aburrimiento por estreñimiento, pues se los ve malhumorados, de ceño fruncido, no responden cuando se les habla y les resulta imposible dibujar en sus rostros aunque sea una sonrisa fingida.

Anecdótico resultó notar, que en una ocasión, una empleada de esta ya madura empresa, oprimía un botoncito para autocalificarse de excelente, la atención que ella brindaba a los usuarios. Viveza criolla, falta de honestidad, en realidad no sabría cómo calificar esta situación. Es necesario notar también que son muy efectivos a la hora de “cortarnos la luz”, pues no esperan ni un día, pero a la hora de la reconexión, el trámite puede complicarse demasiado. No sé si sea, solo una percepción mía, pero podría asegurar que algo pasa, o no pasa; en la empresa eléctrica regional Emelnorte.

La alternativa al gas

No sé si por hacernos despechar del gas licuado de petróleo, o por alguna otra razón desconocida, que por estos meses ha sido un suplicio encontrar una bombona de gas de cocina. Algunos incluso  han viajado de pueblo en pueblo por conseguir el bendito tanque de gas, que nos permita cocinar y calentar la helada agua de nuestras duchas. Sea cual fuere la razón, hacemos un llamado a la sensibilidad de las autoridades gubernamentales, para que mientras no se haga efectiva la migración de las cocinas a gas, a las cocinas eléctricas, se tomen medidas correctivas urgentes, en cuanto a  la distribución del gas.

Refiriéndonos a la iniciativa del gobierno nacional, de cambiar el uso del gas, al de la electricidad en cuanto al tema de la cocción, debemos reconocer que ya era hora y que es una medida acertada. El tema del gas se había convertido en un tema político, a raíz de que la destitución del expresidente Bucarán, se embulló justamente por querer revisar este cuestionado subsidio. Para los gobiernos de turnos posteriores, el tema se había convertido en un tema tabú, que nadie se atrevía a tocar, incluyendo el gobierno actual. Notemos que prácticamente la bombona de gas, es entregada casi de forma gratuita a la población, situación que es aprovechada por algunos “vivarachos”, que sacan provechos poco éticos del asunto. Otro de los inconvenientes es el traslado de estos pesados artefactos arcaicos, que ponen en riesgo la seguridad y la salud de los usuarios, en especial de las amas de casa.

Entonces bienvenida la iniciativa gubernamental de cambiar esta matriz energética, que en los primeros meses de aplicación obviamente causarán algunas molestias a la población, pero que el futuro representará un cambio sustancial en la calidad de vida de los ecuatorianos. El tema de un subsidio inicial a los sectores populares y necesitados, en la adquisición de estos artefactos eléctricos y en los costos que representaría este cambio en los hogares, me parece muy importante, pues no todos estaremos en las condiciones económicas óptimas, para enfrentar este proceso.