sábado, 30 de diciembre de 2017

El Año Viejo

En nuestro medio es más tradicional festejar el Año Viejo, que el Año Nuevo. Tal vez esto se deba a la particularidad de la cosmovisión andina, donde el tiempo pasado está frente a nosotros y el futuro está a nuestras espaldas, por eso la alocución kichwa: “ñawpa pacha” significa pasado, traducido literalmente: el tiempo de al frente. A diferencia de la tradición occidental donde se pone énfasis en recibir el nuevo año, celebrarlo con bombos y platillos, como un acto de recibimiento a un nuevo periodo de tiempo, con el optimismo y la confianza de que serán tiempos mejores; en nuestro medio se pone énfasis en despedir el año que culmina; con alegría, comida y bebida, quemando y “llorando” a un monigote que lo representa y simboliza todas las cosas vividas durante este periodo de tiempo, las cosas malas y las cosas buenas que sucedieron.

Recuerdo esta muy tradicional celebración con mucho cariño, desde que era muy pequeño. El Año Viejo era un día muy especial, porque toda la familia y amigos se reunían para preparar el festejo. Los muy hábiles, muy temprano recogían toda clase de ropa vieja, para confeccionar el monigote, el muñeco de trapo que en el proceso iría tomando la identidad de algún personaje conocido de la comunidad. Otros en cambio madrugaban a recoger palmas y armar el pequeño “altar” o escenario. Nunca faltaban los niños que cruzaban la vía con una soga, para pedir a los transeúntes la “limosnita para el viejito”. Las mujeres por lo general preparaban alimentos para compartir con los participantes. Tampoco faltaba el “purito” con el que se preparaba el “hervido de frutas”. Venían las risas, las carcajadas, la comida, la bebida, el baile, la alegría desbordante. El Año Viejo está muy arraigado en nuestros genes, es un espacio para la irreverencia, la sátira para el político del barrio, para el “guapo” de la esquina; donde algunos jóvenes brevemente expresan la “feminidad” que llevan dentro. El Año Viejo es una auténtica fiesta popular, donde se evidencia aquel dicho que dice: “A mal tiempo, buena cara”. ¡Felicidades a todos y todas! 



viernes, 22 de diciembre de 2017

Algo peor que la muerte

La desaparición de un menor, es una tragedia familiar que incluso supera la muerte. Con un niño desaparecido no se podría encontrar paz ni tranquilidad durante toda la vida, sería un martirio, una tortura, una agonía eterna; algo horrendo e indescriptible por lo que han tenido que pasar miles de familias ecuatorianas, como en el reciente caso de la niña lojana Emilia Benavides. La niña Benavides fue encontrada sin vida, con evidentes señales de violencia. ¿Qué clase de monstruo puede hacer semejante daño a una criatura? Como no podía de ser de otra manera, este hecho macabro y demencial, ha conmocionado al país entero; movilizando gente en la misma ciudad de Loja, en las redes sociales, e incluso las autoridades como de la Policía Nacional y Fiscalía, han efectuado una respuesta inmediata, como siempre debería ser.

El rapto de menores debería ser tipificado como un delito igual o peor que la de un asesinato, con la sanción más drástica posible. Más que cambiar normas legales y sanciones, que por cierto reitero son necesarias, es sumamente importante contar con un organismo profesional de investigación para estos casos; algo de la que adolece nuestro país, según Telmo Pacheco, presidente de la Asociación de Familiares y Amigos de Personas Desaparecidas en Ecuador. Algunas personas incluso no vacilan en pedir la cadena perpetua o la pena de muerte, en casos como violación y muerte de niños y niñas, contradiciendo lo que dicta nuestra constitución y la tradición cristiana de los ecuatorianos. Como ya se ha visto, el riesgo de endurecer las penas en países como el nuestro, es la falta de efectividad del sistema judicial, muchas veces supeditado a los poderes políticos de turno, o peor aún a la galopante corrupción que pasea por las instituciones del Estado. Si la justicia no está garantizada, corremos el riesgo de enviar gente inocente a la cárcel, y esto sería lo peor.

El amor y el cuidado a niños y ancianos, refleja el grado de desarrollo de una sociedad, la efectividad de sus instituciones y más que todo la calidad humana de sus miembros. Niños felices e inteligentes, es nuestra garantía para una sociedad mejor.

sábado, 16 de diciembre de 2017

El manto de la justicia

En un hecho sin precedentes, el Tribunal Penal de la Corte Nacional de Justicia, ha sentenciado a ocho procesados, entre ellos al vicepresidente de la República en funciones, pero que no tiene ninguna función, Jorge Glas, a seis años de prisión, como culpables y autores de asociación ilícita, también deberán pagar 33,3 millones de dólares entre los ocho. Además, el juez Édgar Flores pidió a la Fiscalía que investigara otros siete delitos contra Glas y otros condenados; sin embargo, vale aclarar que esta sentencia es de primer nivel y los procesados han anunciado que apelarán el fallo.

Esperemos que este hecho judicial, marque un punto de quiebre en la muy cuestionada justicia ecuatoriana. Es conocido y sabido que la justicia siempre ha estado en manos de los grupos de poder, o políticos de turno que lo han utilizado a su antojo y capricho, para su acomodo o para perseguir a sus opositores. Más aún en estos últimos diez años, en donde todos los poderes del Estado, estaban supeditados a una sola persona, con el poder de un emperador. Seguiremos insistiendo que la independencia de poderes, es la mejor garantía para que la institucionalidad del país se fortalezca. Un sistema judicial independiente y transparente, es necesario para que los ecuatorianos todos, hombres y mujeres, podamos nuevamente creer en la justicia y la legalidad, que es la base fundamental para una convivencia social aceptable. Un sistema judicial que destierre la impunidad en cualquiera de sus formas.

Es el gran reto inicial del presidente Moreno, enrumbar al país en la democracia institucional participativa, revisar la efectividad o reestructurar el Consejo de Participación Ciudadana, es urgente, para que ciudadanos de altísima probidad ética y sin vinculación partidista, ocupen la titularidad en los organismos más altos de control estatal. El manto de la justicia debe cubrir a todos en las mismas condiciones, a los de poncho o a los de cuello blanco.

jueves, 30 de noviembre de 2017

Auténticos revolucionarios

No cabe duda que la segunda mitad del siglo XX, fue una época donde se desbordaron pasiones por todo lado, hablando en términos socio políticos. El movimiento hippie, la revolución sexual, el rock psicodélico, la conquista del espacio, la Guerra Fría, y las luchas revolucionarias de izquierda principalmente en Latinoamérica, marcaron historia. Luchar contra el statu quo, el sistema opresor y el capitalismo, era un llamado al que muchos jóvenes idealistas abrazaron en su momento, más con el corazón que con la cabeza. Eran pues otros tiempos, donde muchos perdieron la vida y otros como los barbudos cubanos, tuvieron éxito en captar el poder a través de la lucha armada, para luego implantar a sangre y fuego su experimento socialista. Muchos de nosotros, aunque más jóvenes, pudimos de alguna forma sentir esa apasionante efervescencia política en nuestros corazones, hasta el punto de querer renunciar a todo en favor de la revolución.

Desempolvando la biblioteca familiar, encontré un libro que leí hace unos 30 años: “La ideología sandinista y la revolución nicaragüense” de David Nolan, una excelente obra que devela casi en su totalidad el desarrollo de esta revolución centroamericana. En este libro existe una cita que se refiere al juramento que hacían los jóvenes al momento de ingresar al Frente Sandinista de Liberación Nacional – FSLN: “Ante las imágenes de Augusto César Sandino y Ernesto “Che” Guevara, ante la memoria de los héroes y mártires de Nicaragua, América Latina y de toda la humanidad, poso mi mano sobre la bandera roja y negra que significa “Patria Libre o Morir” y juro defender, con las armas en la mano, la dignidad nacional y luchar por la redención de los oprimidos y explotados de Nicaragua y del mundo. Si cumplo esta promesa, la liberación de Nicaragua y de todos los pueblos será mi recompensa, pero si así no lo hiciese, la muerte en la deshonra y la vergüenza serán mi castigo”. Si valió la pena o no, es otra historia; eran otros tiempos, y estos sí eran auténticos revolucionarios; no como los de ahora, una horda de delincuentes expertos en las artes de la demagogia.

viernes, 24 de noviembre de 2017

Trifulca política en la hermandad

Causa confusión. No sé si lo que sucede al interior de Alianza País da pena o gloria. Puede ser hasta gracioso ver cómo los mismos responsables de la debacle institucional, moral y hasta económica del país, se hayan pasado a la otra orilla, para ahora sí acusarse entre compañeros. Me refiero hoy a los leninistas que se esmeran por ubicarse en el lado correcto, que condena los diferentes actos de corrupción, e incluso plantean responsabilidades penales a encubridores y funcionarios que cayeron en omisiones, de los cientos de abusos sexuales a menores, ocurrido en instituciones educativas públicas y privadas del país, durante la década correísta. Pero más patético resulta ver al “ala correísta” de Alianza País, “sin sangre en la cara” como diría mi vecina, defender esta tragedia nacional llamada el “gobierno de la revolución ciudadana”, que instauró en el país el despilfarro, la corrupción, la impunidad, el autoritarismo, el engaño; en estos últimos diez años. Ahora después de este desastre, todavía se escucha murmurar por ahí, “pero ya tenemos carreteras” y que costó lo que costó -millones por cada kilómetro- porque fueron trazados en la serranía y que no nos debería sorprender porque en el país siempre hubo corrupción. Como diría alguien: ¡vaya defender a su abuela!

Alianza País está en su punto más alto de ebullición; por un lado, dicen que regresa Correa, que por cierto no sé cómo hará este señor para caminar tranquilamente por las calles ecuatorianas; por otro lado, el presidente Lenín Moreno no se amilana, sino más bien lo reta a que no se esconda en las fronteras, y ambos han convocado a una convención nacional, cada uno por su lado. Señoras y señores, aquí va a arder Troya y no sabemos como terminará esta trifulca política dentro de la hermandad. Por el bien del país esto tiene que llegar a su fin, y el final solo será provechoso cuando todos los corruptos y encubridores vayan a la cárcel y devuelvan al país todos los bienes mal habidos.

viernes, 17 de noviembre de 2017

Luis De la Torre Amaguaña

















Era uno de esos días un tanto tristes en la comunidad de El Topo de hace ya muchos años, más arriba de San Pablo, en Otavalo. El recuerdo en mi memoria permanece intacto y veo a Luis De la Torre, con guitarra en mano y su potente voz, interpretar la canción que decía: “Sapak inca Atawalpa, ankalli runa Atawalpa…katari Atawalpa, runa rebelde Atawalpa”. El gran amigo, el gran maestro, el gran intelectual kichwa; hoy ya no está con nosotros, ha partido hacia el infinito, ha regresado como decía su hermana Luz, al regazo de la Pachamama; porque surgimos de la tierra y a la tierra volveremos; porque somos polvo cósmico y como tal regresaremos al cosmos, para ser parte de la energía que transforma el universo. El recuerdo viene de esos años en que hacíamos esfuerzos grandes por sacar adelante al Proyecto EBI -Educación Bilingüe Intercultural-, y Luchito como lo llamábamos cariñosamente, era el Director Nacional de este proyecto educativo de innovación.

Runas estudiados hay muchos, pero runas intelectuales hay muy pocos, y Lucho era uno de esos principales, parte de esa generación de kichwas que se habían preparado académicamente y que habían rebasado todas las expectativas. Cuando regresó nuevamente a San Roque, nos encontrábamos casualmente y siempre fluía una conversación extendida y provechosa, como no podía ser de otra manera.

Reflexionamos y nos damos cuenta de las ironías de la vida, al ver a gente incapaz lucrando de la política por décadas; mientras personajes como Lucho De la Torre, un hombre extremadamente preparado para asumir una función de elección popular, nunca lo pudo hacer. El pasado martes ya cerca del mediodía, pude saludarle brevemente de pasadita, sin imaginarme que eran sus últimos pasos. Hemos perdido a un gran ser humano, pero su memoria y legado permanecerán por siempre, como un ejemplo claro para las futuras generaciones de kichwas más que todo. Mis condolencias a sus hijos, hijas y demás familiares que lloran su partida.

El tesoro de Atahualpa, sí existe

Después de que el inca Atahualpa fuera capturado por los españoles en Cajamarca y haber ofrecido por su propia boca, el apilar una habitación llena de objetos de oro y plata, como pago por su liberación; la mayor parte del botín llegó desde Cusco y la parte sureña del Tahuantinsuyo, que en esos momentos estaba en manos de los generales quiteños, quienes habían llegado triunfantes a la capital imperial. En la parte norte, en Quito, Rumiñahui hizo efectivo la orden del Inca, y “según el cronista Fernández de Oviedo, llegó a recaudar 70 000 cargas de oro y plata que iban a ser transportadas a hombro de 15 000 porteadores, cuando llegó la noticia del ajusticiamiento del Inca”. Ante la fatal noticia y previendo la inevitable incursión de los extranjeros, el general quiteño hizo un movimiento rápido, para esconder tan descomunal tesoro, al oriente de Ambato, en la zona de los Llanganatis.

Un tal Valverde, “un modesto soldado o burócrata español”, posiblemente del siglo XVIII, “que desposó a la hija del cacique de Píllaro, quien al tomarle confianza y afecto, le reveló donde se encontraba el tesoro oculto”, habría llegado al lugar para tomar una ínfima parte y convertirse en un hombre muy rico. De vuelta en España y antes de morir decidió revelar el secreto al Rey, el origen de su fortuna, adjuntando a la carta un derrotero o guía. Muchas expediciones se han organizado desde entonces y muchos han perdido la vida en el intento, pero se conoce que uno de ellos, un holandés de nombre Barth Blacke, al intentar dar sepultura a un compañero que murió, “se topó accidentalmente con un tesoro del que extrajo 18 piezas de oro”.

El sueño de descubrir este fabuloso tesoro, en la actualidad todavía continúa intacto y no faltará quien lo siga buscando. Más allá del mito, lo real es que los captores de Atahualpa se hicieron con un tesoro, que les costó un mes entero solo en la fundición y sumó 6 087 kilos de oro y 11 793 kilos de plata. Durante su cautiverio el Inca quiteño “se había ufanado de su fabuloso tesoro” de Quito. Esto nos hace presumir que el tesoro, el que Rumiñahui ocultó incluso con su vida, sí existe y que sigue indemne. 

viernes, 3 de noviembre de 2017

50 precandidatos

En alusión a lo que sucede en Otavalo, alguien decía que, a diferencia de lo que sucedía en los años 90 del siglo pasado, en que el dedicarse a viajar como músicos o comerciantes, de manera especial a Europa o Estados Unidos, estaba de moda; ahora está el de convertirse en político. ¿Será que la “farra” y la “década ganada”, donde los billetes verdes del segundo “boom petrolero” volaban por doquier, llamaron la atención de muchos, que quizá buscan el dinero fácil? o ¿tal vez vieron que cualquier común, con un poco de demagogia revolucionaria, podía llegar a las altas esferas del poder y convertirse en millonario en unos pocos años? o quizá ¿será que existe una verdadera conciencia social de lo que sucede a nivel político, y amplios sectores altruistas de la sociedad, están interesados en contribuir, para forjar una sociedad mejor? Usted estimado lector tendrá que sacar sus propias conclusiones al respecto.

Con el advenimiento de las elecciones seccionales que se efectuarían a inicios de 2019, ya se empiezan a “mover las frutas” y aunque usted no lo crea, en Otavalo existe una lista de aproximadamente medio centenar de personas, que aspiran el sillón principal de la alcaldía. Obviamente que al contrario del dicho que señala “querer es poder”, entre el querer y el poder existe una gran brecha, certeramente muy poquísimos llegarían a la recta final. Para que un político logre el favor del pueblo, no necesita solamente “preparación” y conocimiento de la realidad, sino que gravitan a su alrededor una serie de factores como el liderazgo, carisma, honestidad, visión y recursos económicos para la campaña política. El Ecuador y nuestro cantón en particular, ya ha tenido más que suficiente, ejemplos de gobiernos ineficaces que solo se han dedicado a robar y a malgastar los recursos económicos de todos, como para que cualquier advenedizo se haga cargo del futuro y el erario cantonal.


Sumergirse en el mundo político y constatar su podredumbre, decepciona a cualquiera. Pero también es una responsabilidad compartida de todos y todas, sanear el quehacer político, con la participación de los mejores elementos y más que todo, con gente honrada que sí lo hay.

jueves, 26 de octubre de 2017

El embajador de Argentina

No pasó mucho desde que las declaraciones de una inmigrante venezolana, causara mucho revuelo en el país, hasta el domingo anterior; en el que el embajador de Argentina en el Ecuador, insinuara y dijera en una radio de su país, que los ecuatorianos tenemos el hábito de estar “mugrientos”. En un exabrupto sin proporciones, este señor de nombre Luis Alfredo Juez, trató de justificarse diciendo que “Solamente la mala fe y una malicia infinita se puede descontextualizar mis dichos intentando hacerme quedar mal con un pueblo al que amo”, y mandó una carta de disculpa a la canciller ecuatoriana María Fernanda Espinosa. Pero este señor sin el mínimo pudor, las mete toda, al decir que se trata de una descripción de las comunidades indígenas del Ecuador: “Una de las más conocidas es el pueblo Otavalo. Ellos se visten a la mañana del sábado y están todo el fin de semana con la misma ropa. Me refería a eso, para no estar todo el día con el mismo atuendo pasé por la casa a cambiarme”, además añadió que “para quienes no conocen la idiosincrasia me refería a eso”.

Si fuese el comentario de una persona común, no hubiese merecido ni una pizca de atención, pero se trata nada menos que de un alto funcionario del Gobierno argentino, acreditado en nuestro país, para fomentar nexos de hermandad y respeto entre las dos naciones. Como no podía ser de otra manera el país y sus autoridades han respondido como corresponde, con un “enfático rechazo y disgusto del Gobierno del Ecuador por las aseveraciones”. De la misma forma la primera autoridad del Cantón Otavalo, el Alcalde, ha respondido con molestia e incluso ha declaro a este funcionario argentino como persona “no grata”. Los kichwas otavalos son reconocidos en el mundo por su cultura e  impecable presentación, que incluso se les ha nombrado como los embajadores culturales del país. Ofensas como estas solo ponen de manifiesto los prejuicios racistas que todavía perduran, incluso en los niveles altos de los países de la región. Es oportuno exigir a las autoridades diplomáticas y al Gobierno central ecuatoriano, que pida al gobierno argentino, la inmediata separación de sus funciones, a un señor que no puede mantener su estatus con semejantes complejos de odio hacia los ecuatorianos.

viernes, 20 de octubre de 2017

Hace apenas un siglo












A diferencia de la época medieval o la época colonial, en que por largas centurias no se experimentaban cambios importantes en el desarrollo de las sociedades a nivel global; el último siglo fue realmente impresionante, casi no se puede explicar cómo en un lapso relativamente tan corto de tiempo, la humanidad haya podido ser testigo de una transformación histórica inédita. Indudablemente que las generaciones contemporáneas son las más privilegiadas, al ser testigos de este gran salto tecnológico y cultural del ser humano. Esto obligadamente nos hace reflexionar al mismo tiempo sobre las transformaciones más próximas, de nuestras ciudades, de nuestros pueblos, incluso transformaciones a nivel del núcleo familiar.

Hace más o menos como un siglo, la simplicidad y la tranquilidad reinaban todavía estos valles; Otavalo por ejemplo apenas era un pueblito enclavado en medio de imponentes montañas andinas, sus callecitas y plazas polvorientas poco se diferenciaban de la ruralidad. Apenas había llegado el ferrocarril, y la luz eléctrica recién empezaba a dar un poco de vida a las lúgubres noches de esta comarca; se construye el Teatro Bolívar en 1918 y varias de las instituciones otavaleñas empiezan a constituirse. Culturalmente, la ciudad y el campo eran dos mundos opuestos se podría decir. Los mestizos blanqueados con los mestizos llanos dominaban la urbe, y los “indios” como se los llamaba a los indígenas kichwas, regían en el campo, en sus comunidades; a excepción de los días de feria, donde las necesidades de estos dos sectores humanos, se complementaban. El kichwa, dedicado a la agricultura, la tejeduría, el comercio y otras ramas artesanales, vivía en un medio natural místico, pero descomplicado. La vida indígena llena de interacción social y comunitaria, era un venir y devenir de trabajo duro y acontecimientos festivos. Eran tiempos en que nadie se imaginaba con el ajetreo y el bullicio actual, ni mucho menos con artilugios que en su época hubieran sido considerados mágicos o de milagro. El mundo seguirá transformándose inexorablemente, si tenemos algo de suerte podremos dar testimonio de ese cambio, después de 30 o 40 años. 

viernes, 13 de octubre de 2017

A propósito de Cataluña

Recuerdo que cuando yo, un niño kichwa proveniente de una escuelita rural, entré al colegio de la ciudad, nuestro profesor de literatura, lo primero que nos mandó a leer fue “El Cantar del mio Cid”, un clásico de la literatura española. Debo confesar que cuando intenté leer este clásico no entendí ni una “jota” y pienso que la mayoría de mis compañeros tampoco lo entendieron. ¿Cómo podíamos entender un texto completamente extraño, escrito en un castellano antiguo, que cuenta una historia que sucedió hace como unos 800 años, en un lugar inimaginable al otro lado del mundo? Fue un zarpazo a mis ansias de convertirme en un sano amante de la lectura y el aprendizaje. Espero que por hoy el sistema educativo ecuatoriano haya variado notablemente en pro de una educación acorde a las necesidades y a la realidad nuestra. ¡Ojo! No estoy diciendo que no se debe leer los clásicos de la literatura universal, puede ser de España o de tantas otras naciones alrededor del mundo. Lo que quiero poner en claro es que “primero lo nuestro, lo propio”, más que todo en los inicios.


Hago este recuento porque he notado que distinguidos intelectuales ecuatorianos y otros latinoamericanos como el célebre escritor peruano Mario Vargas Llosa, han saltado con iracundia, ante la legítima aspiración del pueblo catalán, de obtener su independencia, acorde a los preceptos de la libre autodeterminación de los pueblos del mundo. Es como que estos señores todavía tienen escrito en su ADN, la subordinación colonial incondicional, a lo que fue el Imperio español. Las élites latinoamericanas, las mismas que no pudieron cohesionar a sus estados criollos, parece que todavía no han cortado aquel “cordón umbilical” que los ata, a la mal definida “madre patria”. Es la misma ideología que despreció siempre lo “indio”, lo mestizo, lo propio; para acoger preceptos imperialistas muy ajenos a nuestra realidad. Ahora me pregunto: ¿qué pensarán de otros pueblos del mundo que luchan y aspiran con una independencia total, como es el caso Tíbet, Puerto Rico, Kurdistán, Escocia, Irlanda del Norte, o el mismo País Vasco, para enumerar algunos? 

viernes, 6 de octubre de 2017

El caso del pueblo rohinyá









Foto: BBC


Todavía se sigue cometiendo atrocidades alrededor del mundo, y no existe entidad que las pare. Las violaciones a los derechos humanos poco o nada han cambiado desde la Segunda Guerra Mundial, donde millones de seres humanos perdieron la vida, por falsos nacionalismos y las ambiciones de caudillos militares mesiánicos, afanados en dominar el mundo. Por hoy por ejemplo, todavía se sigue asesinando personas por cuestiones religiosas, tal como sucede en la República de la Unión de Myanmar, antigua Birmania, ubicada en el extremo noroeste de la subregión conocida como el Sudeste Asiático. Es un conflicto histórico de tipo étnico cultural, que se remonta a siglos, en el que está inmerso el pueblo rohinyá, el que para el Estado Birmano es un paria, sin derecho alguno, ni siquiera a la nacionalidad birmana. Musulmanes los rohinyás, son acusados de violentos y de querer establecer un estado islámico dentro de Birmania o Myarmar, de mayoría budista. La persecución de la que es objeto este pueblo, ha hecho que organismos internacionales como la misma ONU, califique como un caso de limpieza étnica en pleno siglo XXI. El pueblo rohinyá huye despavorido hacia Bangladesh, de las acciones del ejército birmano, donde se denuncian poblaciones incendiadas, mujeres violadas, niños y ancianos condenados a morir de hambre, gente quemada viva, entre otras atrocidades.

El caso rohinyá no es un caso aislado de etnocidio, sino uno más que empuja a la humanidad hacia una bestialidad solapada que nos denigra, nos deshumaniza. Vivimos tiempos difíciles en que la irracionalidad de ciertos líderes mundiales, podrían poner en serio riesgo la existencia misma de la especie humana, si alguno de ellos en medio de una orgía de poder, arrogancia y ego, aplastase el botón que libere la muerte sobre la faz de la Tierra. Nuestra existencia pacífica no dispone de ninguna garantía, por lo que es necesario reescribir un acuerdo mundial, que más allá de los logros obtenidos por la ONU, esta entidad realmente se constituya en una autoridad mundial, que frene los delitos internacionales, incluso más allá del célebre comodín llamado: soberanía, en casos como el que se describe al inicio.

viernes, 29 de septiembre de 2017

Caos vehicular













Más allá de que la vialidad del sector rural ha mejorado notablemente, la ciudad de Otavalo en este tema, por hoy se encuentra en un caos total. La vía de circunvalación prácticamente ya no circunda ninguna cosa, sino mas bien es una vía que pasa por la mitad de la urbe y genera demasiado conflicto en la movilidad urbana, por el hecho de que se  cortaron algunas intersecciones que conectaban el centro con varias ciudadelas y sectores periféricas de la ciudad.

Con el inicio de clases la intersección entre la vía de circunvalación (Panamericana) y la vía que conduce hacia San Juan, en la parte occidental de la ciudad, se ha convertido en un hervidero total de vehículos, más que todo en horas de salida y entrada estudiantil. A esa parte están algunas instituciones educativas que acogen a miles de estudiantes y en consecuencia hay cientos de padres de familia apurados que se quedan en medio de una congestión terrible en ese cruce vial. El caos se repite en el cruce de las vías que conducen a Selva Alegre que por cierto está en pésimas condiciones y la otra que va hacia Quiroga, donde están dos instituciones educativas. Por otro lado es evidente el caos vehicular que se genera en la entrada norte de la ciudad, junto al redondel, donde los fines de semana existe una gran afluencia de vehículos provenientes de Pichincha, que entran en conflicto con los vehículos que van en sentido contrario hacia el centro de la ciudad. Otavalo necesita acciones inmediatas para remediar esta situación, es necesario habilitar otras vías alternas que den respiro a estos puntos críticos, se debe terminar de una vez por todas la vía de circunvalación y establecer una señalización de primera. Que no se olviden de los pasos peatonales decentes, no esas moles de cemento “laberínticos” que espantan a cualquiera.

El parque automotor ha crecido tanto a nivel local y nacional, y resulta evidente que nuestras ciudades no tuvieron una planificación adecuada como para mitigar esta situación. Por un lado se habla de ciudades renovadas que prioricen al ser humano, al peatón, y así debe ser; pero por otro lado el número de vehículos sigue creciendo y las ciudades tienen que dar una respuesta frente a esta situación, para eso están nuestras las autoridades, que muchas veces se duermen en los laureles.

viernes, 22 de septiembre de 2017

¡Un desmadre!

Cuando se había perdido toda esperanza, tuvo que ocurrir un milagro. Los diez años del correismo fueron traumáticos para el Ecuador y sus efectos perdurarán por algún tiempo. Para el ecuatoriano medianamente informado, sin vínculo alguno al partido del Gobierno, la llamada “década ganada”, no fue más que un desperdicio total, si hablamos de los grandes cambios que necesitaba el país, tanto a nivel estructural, el cambio a la matriz productiva, el fomento a las libertades y  los derechos humanos, la concreción de un auténtico Estado Prurinacional, entre otros ítems. La “Revolución Ciudadana” como lo han contado incluso varios de sus cofundadores, se fue paulatinamente alejándo de sus preceptos iniciales, para recluirse en una especie de un caprichoso y enfermizo dominio caudillista. Lo que ya se sabía de dientes para adentro hoy comienza a develarse en medio de una especie de grotesca telenovela, donde las pasiones, las traiciones, el robo, el espionaje, la corrupción, el contubernio, y no sé qué desmadre más, constituyen la trama de cada capítulo. Por todo esto bajó la popularidad del anterior régimen, por todo esto la mitad de los ecuatorianos no votó por el continuismo que representaba Lenín Moreno, por todo esto muchos tuvieron que regresar a ver obligadamente al candidato banquero.

La historia es conocida, el candidato oficial se impuso en medio de cuestionamientos a la independencia del Consejo Nacional Electoral y sospechas de fraude. Aunque el grito de amplios sectores de la sociedad ecuatoriana se escuchó por todos lados, las cartas ya estaban echadas y las esperanzas se fueron desvaneciendo con el pasar de los días. Pero el milagro ocurrió. Contrario a lo que muchos esperaban, el nuevo presidente ecuatoriano efectivamente se sacudió del correismo y en correspondencia al clamor nacional abrazó la sensatez y  proclamó una lucha abierta contra la corrupción y la apertura de canales de diálogo entre el Gobierno y la sociedad civil. Aunque haya sido parte del gobierno anterior, siempre miré a Lenín Moreno como a un hombre bueno. Por el bien de todos, ojalá no nos equivoquemos de nuevo.

lunes, 18 de septiembre de 2017

Es lo que somos












Un video de Youtube en el que una venezolana inmigrante señala a los ecuatorianos como “indios feos”, se ha viralizado y ha provocado una cantidad de reacciones que dejan a flote, la calidad de sociedades en la que vivimos. Por un lado persiste el complejo colonial arcaico, de que si no eres blanco, caucásico, europeo o norteamericano; eres menos, de poco valor o simplemente feo; por otro lado, los ecuatorianos no terminamos de aceptar algo que está explícito, en nuestra forma de hablar, en nuestra apariencia, nuestra idiosincrasia, que nos delata a leguas; nuestra condición de runas, de indígenas o de indios, como quiera que lo llamemos, y lo tomamos como algo indigno o como un insulto. Claro que muchos con sobresalto dirán, no, no; somos mestizos, como queriendo opacar su mayoritaria herencia genética, que es autóctona. Existe más todavía, la creencia absurda y estúpida de que mientras más blanca sea tu piel, más se acerca a lo bello; nada más fuera de la realidad, pues incluso dentro de cánones y arquetipos de belleza occidental, podemos encontrar gente “bella”, tanto en afrodescendientes, asiáticos, amerindios y otros grupos étnicos. Es pues una creencia retrógrada que refleja la limitada capacidad intelectual de sus creyentes. Pero para el colmo son creencias que han florecido en tierras latinoamericanas, donde casi la totalidad de su población tiene profundas raíces indígenas, complementadas con raíces africanas y  europeas, para ser más específico de la Europa morisca peninsular. Esto demuestra una monumental falta de autoestima, en otras palabras, sentirse menos, tener lástima de su propia condición étnica o “racial”. 

En realidad resulta incómodo abordar estos temas que nos hacen retroceder siglos, pero toca ir afinando algunas desavenencias en cuanto a conceptos y creencias, que surgen alrededor de este tema cada cierto tiempo. Ya es hora de sepultar nuestra manía de prejuzgar a la gente por su condición étnica, cultural, social, laboral o de género. Asumir nuestra identidad genética y cultural con orgullo, no solo proyecta nuestro buen nivel de autoestima, sino que devela una mente abierta y educada.

lunes, 11 de septiembre de 2017

La inhumanidad en Ecuador


Nos sorprende la impavidez de los ecuatorianos frente a una noticia que debería ser un escándalo nacional, donde todos deberíamos sentirnos denigrados y exigir la más ágil investigación de parte de las autoridades de la Función Judicial, para que los culpables reciban el máxima castigo. Me refiero a las denuncias de torturas en la cárcel de El Turi de Cuenca. Los testimonios de reclusos y familiares, víctimas de extorsión revelan dramáticos testimonios de supuestas prácticas de tortura al interior de este centro de rehabilitación social, conocido como El Turi. Según una nota de prensa “Los internos testimoniaron ante las autoridades fiscales que les maltrataban físicamente de forma masiva o individual, mediante descargas eléctricas de alto voltaje, colgándoles de los pulgares o arrojándoles agua helada durante la noche y madrugada.” Todo esto consta en el proceso que la Fiscalía investiga, una supuesta operación de una red de extorsión, en la que se encuentran involucrados internos y el exdirector de la cárcel.

“He venido viviendo una pesadilla, me han apuñalado los glúteos, el pulmón…me torturaban, pasaban los cables por medio de unas ventanas de una celda que había a lado, me ponían los pies en baldes de agua y los cables en los pulgares”, cuenta uno de los internos a un perito legal. Según las primeras investigaciones los relatos coinciden con las lesiones encontradas en el cuerpo de un interno. Según las noticias parece que las motivaciones de estas monstruosidades fue el dinero. Las víctimas cuentan que entregaron miles de dólares a los victimarios, incluso vendiendo algunos enseres de la casa. Una abominable noticia que pesábamos solo sucedía en países lejanos o en películas de terror.


Obvio que la responsabilidad por estas aberraciones del sistema estatal cae en el Gobierno Nacional, más aún en un gobierno que se autocalificaba como íntegro y respetuoso de los derechos humanos. Cómo las autoridades carcelarias y del sistema judicial no se percataron de semejante inhumanidad que ocurría frente a sus narices, eso por no sospechar que la permitieron o la socaparon. Muchos abusos comienzan a develarse. ¡Que los culpables sean castigados! 

viernes, 1 de septiembre de 2017

Otavalo












Otavalo ocupa un paradisiaco rincón de la cordillera andina ecuatoriana y una ubicación  privilegiada. En el Hemisferio Norte, a un paso de la Línea Ecuatorial, Otavalo está apenas a unos 100 kilómetros de Quito, la capital de la República; a un poco más de una hora del Aeropuerto Internacional Mariscal Sucre, con vuelos y conexiones a cualquier parte del mundo; a unos 150 kilómetros aproximadamente de la frontera con Colombia. A un tiempo muy cortísimo de la Costa o de la Región Amazónica. Colindante con otros hermosos valles andinos, el Valle del Amanecer surge en la tranquilidad de sus azules cielos, rodeados de imponentes montañas, desde donde se puede contemplar a plenitud la majestad de la creación y la pujanza de sus hijos e hijas, que han impregnado en su tierra su huella indeleble.

Esa será la razón para que los que tomaron vuelo a otras partes del mundo, entre los que se destacan los comerciantes kichwas, afincados en la mayoría de países del mundo, retornen cada cierto tiempo, para como dicen “recargarse” con su madre tierra; y otros que no lo pueden hacer, vivan siempre con la añoranza del recuerdo y el deseo eterno en el regreso a su tierra, a su “llakta”.

En la actualidad Otavalo se proyecta al mundo como una ciudad intercultural, por la particularidad de que aquí conviven dos culturas, la mestiza y la indígena. La interculturalidad en su estatus pleno, correspondería a un proceso social complejo, dada nuestra particularidad histórica; por lo que se puede afirmar que la nuestra, la de Otavalo está en construcción. Como coterráneos tenemos las herramientas y la materia prima de gran valía, para proyectarnos hacia la consecución de nuestras aspiraciones, que es la reconstrucción de Otavalo como una ciudad de Cultura, turismo y trabajo, acorde a las exigencias del siglo XXI. El reto es nuestro, la de ustedes, de todos; convertir a Otavalo en una ciudad del mundo, pero una ciudad con identidad propia. ¡Que viva Otavalo!

miércoles, 30 de agosto de 2017

Violencia y derecho internacional

Es cierto que cuando se produce algún atentado terrorista en Europa o Estados Unidos, la noticia y los sentimientos de repudio y solidaridad con las víctimas, trasciende muchísimo más rápido en occidente, que las matanzas y la barbarie que se produce en la guerra de Siria, en el Oriente Medio. Esto puede ser explicado por la cercanía de los escenarios de terror y el vínculo de los medios occidentales con el sentir de sus respectivos países, como también con la cruzada de occidente. Pero estas situaciones jamás, ni remotamente nos deberían inclinar a justificar esta clase actos abominables; con mucha más razón todavía, si va en contra de personas inofensivas e inocentes, tal como ocurrió hace poco en la ciudad española de Barcelona.

Lo de Siria realmente es trágico, y a lado de otros acontecimientos suscitados desde la Segunda Guerra Mundial, como la Guerra de Vietnam, la matanza fratricida y desquiciada de Camboya, el genocidio de Ruanda, la masacre genocida en los Balcanes, la Guerra del Golfo, la catástrofe humanitaria se Somalia, entre otros; constituye una vergüenza para la humanidad. Más allá del principio de la no intervención y la autodeterminación de los pueblos, debería prevalecer como una normativa supranacional, la vigencia plena de los derechos humanos, para que en ningún rincón del mundo, sea pisoteada la dignidad humana. Las ideas altruista del expresidente ecuatoriano Jaime Roldós Aguilera, sobre los derechos humanos, recogidas en la llamada Carta de Conducta, establece el principio de que en la región no puede invocarse la soberanía para justificar violaciones a los derechos humanos, y esto se debería aplicarse a escala universal. Obviamente que en la geopolítica están las potencias hegemónicas como buitres al acecho y hay que tener cuidado de sus tentáculos. Es necesario que la institucionalidad de la ONU, evolucione hacia una potestad de plena vinculación para los estados del mundo, donde prime la plena vigencia de los derechos humanos, con una clara agenda en donde prevalezca también un programa de desarme mundial, el respeto al medio ambiente y la reducción drástica de la brecha entre pobres y ricos. Como cualquier pueblito, nuestra aldea global sí necesita de un policía.

sábado, 19 de agosto de 2017

Acciones inefectivas

Para nadie es desconocido que los accidentes de tránsito se han incrementado en los últimos años y que las vías del país están teñidas de sangre y dolor. Absolutamente nadie está seguro y las cifras publicadas enfunden terror y temor. Obviamente que las autoridades de control tienen un índice alto de responsabilidad frente a estos hechos, básicamente porque no han podido establecer una política efectiva que logre estabilizar o en el mejor de los casos disminuir drásticamente estos índices de siniestralidad. De acuerdo con una información de la Agencia Nacional de Tránsito (ATN), “el 50, 09% de los accidentes se produce por impericia o imprudencia del conductor, el 13,2% por irrespeto a las normas de tránsito, el 12,31% por exceso de velocidad, el 9,73% por embriaguez, el 7,69% por condiciones extremas sin determinar y el 6,99% por imprudencia de otros involucrados.

Hace poco se firmó un Pacto Nacional de Seguridad Vial, entre los representantes de los transportistas, de la sociedad civil y del Gobierno Nacional, justamente para trabajar en un plan de acción que disminuya la siniestralidad en el país. Ninguna acción tendrá los resultados esperados si no se toma el problema con la seriedad requerida y la apuesta en una acción integral. Erróneamente pensaron nuestros “honorables” asambleístas que con sanciones más drásticas y la distribución de competencias se lograría mitigar los problemas de movilidad y transportación en el país. En esto seguiremos enfáticos en señalar que se necesita una capacitación vial permanente, control y más control. No sé a quién se le ocurrió esto de la creación de los Agentes Civiles de Tránsito, que me parece un despilfarro de recursos y aumento de una burocracia inoperante. Por otro lado he visto a señoritas policías recién graduadas, que más se dedican a pasear entre compañeras y hablar por teléfono, que a efectuar algún tipo de control; muy necesarios en carreteras, intersecciones, semáforos, salida de escuelas, pasos cebras, parada de buses, etc. Las autoridades de tránsito deben estar ahí, para educar, controlar y sancionar.  


viernes, 11 de agosto de 2017

Corrupción

Una de las definiciones de corrupción del diccionario de la Real Academia Española, dice: “En las organizaciones, especialmente en las públicas, práctica consistente en la utilización de las funciones o medios de aquellas en provecho, económico o de otra índole, de sus gestores.” El común de los mortales, con razón, al escuchar este término lo asocia inmediatamente con el robo de fondos públicos. Lamentablemente en el quehacer político y en las funciones públicas, siempre ha estado incrustada la podredumbre de la corrupción. Este flagelo de la humanidad está directamente relacionado a la resistencia a regirse por los valores morales y éticos, que se han establecido como costumbre y mecanismo de convivencia, para normar de alguna forma la ambición que es parte de la condición del ser humano.


Aunque el tema de la corrupción siempre estuvo presente en los ámbitos políticos de la región, los escándalos que se han suscitado a nivel de Latinoamérica en los últimos tiempos, rebasan toda medida; más aún cuando el tema involucra a gobiernos llamado progresistas y de izquierda, a los que sus electores brindó confianza con la esperanza de que marquen diferencia de la tradicional clase política e inauguren la pulcritud en el manejo de las arcas públicas, en beneficio de las grandes mayorías. Atrás quedaron en el fango frases como: “manos limpias y mentes lúcidas”, “todo para la patria, nada para nosotros”, “la espada de Bolívar que recorre América Latina” o “vamos a inaugurar la decencia”. Lamentable, denigrante. Dos cosas se necesitan para establecer la honestidad en un país: La educación que involucra nuestra responsabilidad como padres de familia, como también del sistema educativo, por un lado; por otro, la consolidación de instituciones democráticas fuertes e independientes, como el Poder Judicial. A esto se le podría añadir la libertad de expresión. La lucha contra la corrupción debe ser una cruzada mundial en la que nos involucremos todos, aquí en el Ecuador debería ser un tema de unidad nacional, más allá de las absurdas pasiones políticas que enceguecen el sano juicio.

viernes, 4 de agosto de 2017

Despropósito chavista

Aunque el Gobierno Nacional por medio de su cancillería, de manera inexplicable, todavía dé su voto de confianza al gobierno de Nicolás Maduro, el ciudadano común con una mínima capacidad reflexiva, no puede hacerse el loco y pretender desentenderse de lo que sucede en la hermana República Bolivariana de Venezuela. Es evidente que en el país de Bolívar se ha roto el sistema constitucional desde hace ya tiempo, y que la demencial dirigencia política del Partido Socialista Unido de Venezuela, representado en las toscas personalidades de Maduro y Diosdado Cabello, empujan al país con uñas y dientes hacia el borde del precipicio y una eventual guerra civil. A más de politizar las fuerzas armadas, el chavismo armó a 170 000 civiles que solo responden a los designios del fanatismo partidista; esto se ha convertido en el gran coraza inexpugnable de un sinsentido poder incrustado como un parásito en la vida de los venezolanos.

Frente al llamado y la eventual consecución de una asamblea constitucional, que por sus características nació muerta, y el nuevo encarcelamiento a sus opositores, la impavidez del mundo frente a la situación, comienza a desintegrarse para una condena sin vacilaciones al gobierno dictatorial de Maduro. Mientras esto sucede miles de venezolanos en un drama sin precedentes, abandonan en avalancha su país querido. También a Otavalo, han regresado parientes kichwas que hicieron su vida misma en Venezuela y tienen que comenzar nuevamente de cero, en una realidad diferente. No queda otra, la respuesta internacional debe ser contundente, para restituir la democracia en este país hermano; más aún el chavismo deberá responder ante la justicia, por sus evidentes actos de corrupción denunciados por la oposición. A veces se fanfarronea al decir que no nos interesa para nada la política, y que mientras vivamos de nuestro trabajo, no nos afectará. Esto es falso, guste o no nos guste, estamos supeditados a las decisiones y acciones de estas y estos “ilustres” ciudadanos políticos. 
  

viernes, 28 de julio de 2017

Rituales y bebidas espirituosas

















Ciertamente el alcoholismo es un mal endémico incrustado en diferentes sociedades alrededor del mundo, que ha costado millones de vidas en torno a ella. El alcohol como cualquiera de las otras drogas, puede crear una adicción de resultados catastróficos del que es muy difícil escapar. Las drogas al igual que en la medicina deben ser tratadas con mucho cuidado, respeto y delicadeza, porque es un producto de naturaleza que bien podría ayudar al ser humano. El problema surge cuando la debilidad humana por los placeres mundanales, se impone sobre la conciencia y el raciocinio. En todo caso es un problema complejo al que las leyes y la ética deben dar una salida o condición aceptable.

En el mundo indígena andino, también ha existido la costumbre de embriagarse con chicha de maíz y en épocas actuales con las bebidas espirituosas comerciales. Estudiosos incluso enfatizan que en toda reunión social andina, había la costumbre de beber. Actualmente en las fiestas kichwas se puede notar que existe la costumbre de embriagarse entre los compadres y comadres, pero no por gusto o peor aún por vicio, sino por profundizar lazos familiares en un estado de sinceridad espiritual, al que yo lo llamo como el ritual del “machana”. En la costumbre occidental, en una fiesta, si se quiere tomar, se acude al bar y se sirve lo que uno quiere y punto; en una fiesta andina eso no sucede, una persona nunca puede tomar una bebida alcohólica sola; necesariamente tiene que existir coparticipación, retribución, acompañamiento. Una fiesta kichwa es exitosa si se han embriagado los participantes y aunque suene un poco extraño, los compadres expresan satisfacción y gratitud por ello. La ritualidad y el simbolismo están presentes en cuestiones triviales y sencillas de la vida misma de los kichwas, más aún en celebraciones familiares grandes como las que hemos descrito; por eso es necesario conocer en su esencia sus prácticas culturales, antes de concluir en apreciaciones superficiales o comparaciones antropológicamente ajenas.

jueves, 27 de julio de 2017

Ojo con “San Juan Capilla”












Hace ya varios años, desde la prefectura se hicieron varios trabajos en el estadio de la comunidad de Agato, entre ellos graderío, adecentamiento de la cancha y cerramiento. La obra fue muy esperada, pero por inconsulta la obra en su conjunto estaba mal hecha, pues no respondía a la realidad socio cultural del medio, a la que las autoridades de aquel entonces dejaron pasar nomas, y ni qué decir de los técnicos y profesionales que estaban a cargo de la obra. A la comunidad de Agato no le quedó otra que a punta de picos y barras derrumbar el desatinado cerramiento de ladrillo, para remplazarlo con una malla metálica que le dio una mejor apariencia y funcionalidad. Cuento esta historia para poner en claro que a veces los dineros públicos no son bien invertidos por nuestros representantes en la función pública.

Con la idea de gestar un proyecto de infraestructura que responda a la realidad cultural, histórica y social de “San Juan Capilla”, de la comunidad del mismo nombre, ubicada prácticamente a unas cuadras del centro de la ciudad de Otavalo, en un inicio y en un acto sin precedentes, nos reunimos profesionales kichwas de diversas ramas, como arquitectos, antropólogos, sociólogos, comunicadores, gestores culturales, entre otros; y así lo hicimos, concluimos y presentamos el proyecto muy bien fundamentado al Municipio de Otavalo. Pero en medio de la  burocracia, los intereses politiqueros, los “contreras”; el proyecto fue reformulado desde el municipio. Ahora, escucho que a este ancestral espacio de ritualidad, de profundo significado no solo para la comunidad, sino para el Pueblo Kichwa Otavalo en su conjunto, le quieren convertir en una especie de parque o “mercadillo”, más peor aún escucho que quieren poner una pileta en el medio. El concepto vernáculo solar andino y el trabajo de meses parece que fue desechado. Ahora no sabemos a ciencia cierta, qué mismo se va a hacer. El desconocimiento es atrevido, por no usar otro término. Mucho ojo con “San Juan Capilla”.
   

viernes, 14 de julio de 2017

Cosas de la política


Para una considerable masa de connacionales, debe ser difícil ser delatados por uno de sus más queridos compañeros; me refiero a las últimas declaraciones del presidente Lenín Moreno que entre otras verdades ya conocidas reafirmó lo siguiente: “Toda la gente va ir abandonando su comportamiento ovejuno y empezar a respirar esa libertad nueva”, también dijo contradictoriamente a las afirmaciones de Correa que: “No hay tal mesa servida (…) se podía ser un poquito más mesurado en dejar cuentas en mejores condiciones”, y hace poco en una reunión en Carondelet, con directivos de varios medios de comunicación del país, Moreno pidió que ellos sean los primeros en denunciar la corrupción en el Ecuador. Estas declaraciones y otras posicionan al Presidente como un hombre sensato y de una lucidez abismalmente diferente al del anterior jefe de gabinete. Bueno, aparentemente eso es lo que refleja la realidad política actual.

Pese a las últimas y claras desavenencias entre Moreno y Correa, aún existe la sospecha de que toda esta “telenovela” sea parte de algún libreto tramado en las catacumbas de la pasión revolucionaria de Alianza País. Se podría especular que todo esto sea un montaje para “dar de baja” a Moreno y ungir a Jorge Glas o José Serrano, o más peor aún, propiciar la llamada “muerte cruzada” para que nuevamente retorne al poder Rafael Correa Delgado. En política todo es posible, recordemos que sin ser el mejor presidente, Velasco Ibarra regresó y fue cinco veces electo como primer mandatario. En realidad mientras el país tiene un problema económico muy serio por el descomunal endeudamiento y la degradante situación de sus instituciones, Correa aprovechó su última instancia en el país, para darse un baño de popularidad con “viudas” incluidas, que lloraban su partida. Pero ojo, el exmandatario, no va a vivir en uno de sus paraísos revolucionarios como Cuba o Venezuela, sino en Bélgica, eximperio y cuna del capitalismo al que dice repudiar. Cosas de la política.
  

miércoles, 12 de julio de 2017

Dardos contra Moreno

(Diario El Norte - viernes 07-07-2017)

Ciertamente produce gracia, notar que ante el llamado del presidente Moreno a la oposición, a dialogar sobre diferentes problemas que aquejan al país; el expresidente Correa, en algún rincón de la patria, esté dando saltos de berrinche. Frente a la última década de una “unidad medievalmente sumisa” del oficialismo, resulta difícil convencernos de que al interior de Alianza País se haya producido una fisura.

En su tiempo el oficialismo reformó la Constitución, contrariamente al sentir popular, con la única intención de llevar nuevamente a Rafael Correa a la reelección presidencial, pero me parece que las cosas no salieron como lo planeado, sencillamente porque el pueblo ecuatoriano o una gran mayoría de ella, ya estaba hasta la coronilla, del estilo discordante del líder número uno de esa agrupación política, que logró incluso la división de las familias ecuatorianas. De esta forma en medio de dos facciones políticas, Alianza País tuvo que necesariamente elegir a Lenín Moreno como su candidato, en desmedro de la otra opción que tenían como su mejor carta de presentación a Jorge Glas, Vicepresidente de la República, hombre un tanto misterioso que no inspira mucha confianza en el electorado ecuatoriano. Así el oficialismo se presentó con Moreno, un hombre sencillo de aceptada credibilidad más que todo en los sectores sociales, donde en su tiempo ejecutó un gran trabajo; un hombre que en definitiva contrastaba fuertemente al interior del oficialismo.

Es evidente y fue evidente que el país clamaba por un cambio, por la unidad, por la sensatez y la paz; estimo que el presidente Moreno está consciente de eso y está dispuesto a “sanear” la política ecuatoriana para bien. Pero lamentablemente se puede ver por otro lado, que existen los de la vieja escuela correísta, acostumbrada al tumulto, a la bronca –tal como sucedió en la comparecencia del vicepresidente Glas en la Fiscalía-, que junto a su antiguo líder están lanzando dardos al presidente Moreno; quien ha respondido acertadamente: “Para el odio no cuenten conmigo”

jueves, 29 de junio de 2017

Los encuentros violentos del Inti Raymi












Sobre los últimos sucesos lamentables de violencia y vandalismo, suscitados en las celebraciones del Inti Raymi en Cotacachi y “San Juan Capilla” de Otavalo, se han proferido una serie de calificativos y criterios que rayan en la generalización, el desconocimiento e incluso en el racismo. Antes de explicar este fenómeno social, sin ninguna intención de justificar, quisiera poner en claro que no estamos de acuerdo con la violencia en cualquiera de sus manifestaciones, más aún si esta pone en riesgo a otras personas que nada tienen que ver con el asunto. Tristemente la violencia es algo inherente del ser humano, ninguna sociedad por más civilizada se autoproclame, podría cubrirse con el santo velo del pacifismo puro; entonces sobran esos calificativos de “salvajes”, “incivilizados”, etcétera. Hemos visto peores cosas en un estadio de fútbol, calles y plazas de sociedades llamadas del “primer mundo”, ni qué decir de las guerras y otros conflictos políticos.

En el caso del “tinkuy” o “encuentro” que se produce en los bailes del Inti Raymi, se podría señalar que esta práctica se remite a la época incásica, donde la nobleza inca, distribuida en “panakas” o linajes familiares, se dividían y rivalizaban dentro de dos grandes grupos, los del “hanan” Cusco y “urin” Cusco, dicho de otra forma, entre parcialidades altas y las parcialidades bajas. En Cotacachi se puede notar claramente esta característica, en los encuentros de comunidades al momento de la toma de la plaza central, que por cierto en su antaño era un sitio sumamente sacralizado. En el Inti Raymi hay un despliegue impresionante de energía y fuerza, que solo los que han vivido la experiencia lo podrán entender; y esa energía se desfoga en la fuerza del zapateo, de la música y de los cánticos; en el caso de Cotacachi una de sus válvulas es el enfrentamiento entre rivales. Este encuentro o “tinkuy” por hoy se ha degradado con la intromisión de factores exógenos como las pandillas, el uso de armas como piedras, cables, cuchillos e incluso armas de fuego. Urge detener de inmediato estos actos, es un gran reto para las autoridades y comunidades involucradas.

viernes, 23 de junio de 2017

Diálogo Nacional

El presidente Lenín Moreno ha dado muestras de sensatez y ha empezado su mandato con un gran llamado a un Diálogo Nacional. La iniciativa fue inaugurada el día martes, justamente en Guayaquil, con la presencia de importantes personajes de diversos sectores políticos. En el acto se detalló que se instalarán siete mesas político-estratégico; Acuerdo Plurinacional, Consejo Consultivo Empresarial, Acuerdo por la Unidad, Acuerdo por la Información, Acuerdo por la Educación, Acuerdo por el Agro y Lucha contra la Corrupción. Esto sería “un instrumento participativo para la concreción de acuerdos que permitan el fortalecimiento del mandato popular y la construcción de políticas estatales que mejoren la gobernabilidad”. Es importante señalar que la participación de los sectores involucrados en cada una de las mesas, es imprescindible, antes de dar inicio con los plazos establecidos; entre ellos la Conaie, que con justa razón, ha planteado la amnistía e indulto a dirigentes presos y perseguidos.

La propuesta presidencial constituye un hecho sin precedentes en la última década de la vida política del país. Es claro que Lenín Moreno más allá de un estilo diferente, quiere marcar diferencia en cuanto a gobernabilidad y visión política en función de país; primero para salir de este atolladero económico, fruto de una década de despilfarro y endeudamiento; segundo, lo que cualquier presidente desearía: pasar a la historia con honores y dignidad. Aunque el fantasma del correísmo lo asechará siempre y que básicamente es su talón de Aquiles, Moreno empieza su gestión con “pie derecho”. Lamentablemente existen rostros cansinos y sumisos de la administración anterior, que dan un zarpazo a cualquier buen mortal que quiera entusiasmarse con este buen inicio. El Diálogo Nacional, según el Presidente estará coordinado por la Secretaría Nacional de Gestión de la Política, en la persona de Paola Pabón, una sumisa confesa del anterior régimen.

sábado, 17 de junio de 2017

El sacrificio de un padre














Todavía no había amanecido, pero se sentía mucho trajinar en la casa; a la luz tenue de una rústica lámpara de queroseno, se distinguía un bulto enorme cubierto con una tela azul a rayas y presionada con gruesas sogas de cabuya. Era pequeño y no entendía lo que realmente sucedía, hasta que vi sollozar a mi madre; era el momento de la despedida, nos abrazamos los tres con los ojos llorosos; mi padre emprendía un largo y difícil viaje al extranjero, con una cantidad considerable de artesanía producida en las comunidades. El retorno y la suerte del viaje habían sido inciertos, tal como me enteré años después. Muchas cosas sucedieron en este y otros viajes que realizó nuestro padre a lo largo de los años como “mindalae”, con el afán de sacar a su familia adelante y brindarnos un futuro mejor.

A razón de que nuestras sociedades son patriarcales, con el matrimonio es el varón quien asume la responsabilidad mayor de su familia. La vida de muchos padres de familias kichwas, ha sido y es difícil. Una vez que han decidido formalizar la unión marital, tienen que buscarse el sustento familiar, por lo general según la tradición de su “ayllu”. Muchos como corresponde, inician sus viajes al extranjero en condición de comerciantes. Existen cantidad de historias que ponen al detalle las peripecias de muchos padres de familia, muchas veces junto a sus esposas, en este duro trajinar de explorar el mundo con motivos comerciales de subsistencia; historias que incluso se sigue suscitando hasta tiempos actuales.

Aunque no comparto del todo, con esos días dedicados a equis personas, me permito hacer un paréntesis para hacer un justo homenaje y extender nuestro reconocimiento a todos esos padres de familia que siempre enaltecieron en el diario batallar, el sacrificio y la persistencia.   Agradecimiento profundo a todos los papás, unos que todavía siguen con nosotros y otros que partieron hacia el infinito. “Alli kikinpak punchata charipaychi taytakuna”

viernes, 9 de junio de 2017

Pasarela kichwa



Es reconocido no solo a nivel nacional, que el traje formal kichwa otavalo, -para mí decirlo típico, suena a folclórico- es uno de los más sobrios y elegantes que existe a nivel de los pueblos originarios. Aunque la moda comercial foránea trata de imponerse en nuestro medio, es común más que todo en ocasiones especiales, ver el orgulloso pose kichwa, bajo el manto de la vistosa indumentaria nuestra, por las calles y comunidades de nuestro Otavalo. Pero también los otavalos fiel a su linaje de emprendedores e innovadores, sin perder la esencia y la tradición, no se han quedado  en el pasado en cuanto a la “moda propia”; muchas diseñadoras han perfeccionado la indumentaria kichwa femenina más que todo, acorde a las exigencias de la contemporaneidad. Pero la respuesta de los estamentos públicos, quedaba corto ante la iniciativa y la dinámica particular de este pueblo pujante y laborioso, acostumbrado a arreglárselas a solas.

Me he es muy grato enterarme que el día de mañana sábado 10 de junio, se va a realizar una pasarela kichwa denominada “Warmi Moda”, en las instalaciones del nuevo Mercado 24 de Mayo de la ciudad de Otavalo, donde entiendo no se remitirán solo a la moda tradicional femenina, sino que se extenderá hacia la moda masculina, y por qué no pensar también en la moda de los chiquitines kichwas. Hasta hace más de una década, si no me equivoco, recuerdo que existía una feria anual del Inti Raymi, justo el 23 de junio, dedicada exclusivamente al atuendo tradicional, disfraces e instrumentos musicales para la celebración; esto prácticamente se ha perdido. Estos espacios vivenciales de  nuestro pueblo, son las que necesitan el impulso y el apoyo necesario de parte de las autoridades, para mantener las tradiciones culturales y fomentar turismo en el cantón; enhorabuena que se realice esta exposición que bien podría suplir la feria anual del solsticio. Es propicio y justo extender una cálida felicitación a los organizadores,  pero también pedir que eventos como estos se institucionalicen y se amplíen, tanto en calidad y en contenido. ¡Muy bien! yo pongo mi “like”.

lunes, 5 de junio de 2017

Hablemos de turismo

Hablar del tema turístico, aunque parezca simple, resulta complicado; más aún en Otavalo. Es difícil hacer todo un tratado en apenas unas líneas, pero se puede señalar algunas pautas básicas con respecto al turismo en Otavalo. Para iniciar sabemos que todos estamos conscientes sobre la importancia que tiene el tema turístico para el cantón y la provincia; las autoridades correspondientes, supongo que hacen los esfuerzos necesarios para enrumbar nuevamente a Otavalo en la lista de los destinos turísticos preferidos como en el antaño. Pero más allá de la conciencia y la buena voluntad, para intervenir efectivamente en el problema turístico, hace falta conocimiento, visión, liderazgo y recursos. Hay que hacer notar que es un trabajo transversal a mediano o largo plazo, donde la participación de los sectores involucrados, es esencial. Es un trabajo difícil, pero no imposible.

Resulta inconsistente y trivial pensar que con un POA medianamente creativo, por no utilizar otro término; una promoción ocasional por la televisión, una valla publicitaria, un “stand” promocional en alguna feria turística o una bonita página web; se pueda remediar el tema turístico en nuestro cantón. El turismo se genera por las buenas condiciones y buenas referencias. El turista regresa y recomienda cuando existe algo bonito, agradable y un trato amable. Ahora bien, ¿cómo podemos esperar una buena recomendación, cuando ya casi no existe ese algo “bonito” que ver, cuando las calles están sucias, cuando el desorden y el caos reina en la ciudad, cuando existen conductores y gente irrespetuosa, cuando no existen lugares decentes donde quedarse, comer o divertirse, cuando el arte y la cultura se desplaza al mero folclorismo, cuando la calidad y la innovación artesanal se ha extraviado, cuando no se garantice la seguridad de los visitantes, cuando hemos perdido nuestra “identidad arquitectónica”? La lista podría extenderse más, pero con esto podríamos tener una pista, sobre dónde estamos fallando, tanto autoridades y población en general.  

Cambio de mando

El doctor Alfredo Palacio, expresidente de la República, quién dio la oportunidad a un desconocido profesor universitario llamado Rafael Correa, para que demuestre sus dotes de economista y tenga el “chance” de emerger en la arena política del país, nombrándolo Ministro de Economía y Finanzas en el 2005; lo dijo claramente el 24 de mayo pasado: “no creo en la reelección en lo absoluto, creo en la total alternabilidad”. En este sentido todo cambio de mando resulta saludable para la democracia, a más de ser un acto ritual muy emotivo, crea expectativas y la esperanza de un mejor porvenir. La fiesta democrática y la conmemoración de la Batalla de Pichincha, con la que Ecuador selló su independencia de España en 1822, del pasado miércoles, no fue la excepción; un acto protocolar y cívico en el que asumió sus funciones Lenín Moreno, como Presidente Constitucional de la República del Ecuador.

El discurso de Moreno fue conciliador y convincente, entre otras cosas dijo: “todos somos hechos del mismo barro”, “Ha concluido una etapa que, como todas, no está libre de errores…”, además dijo algo que considero fundamental: “no puede haber diálogo sin libertad de expresión”. También dijo que no habrá las llamadas sabatinas, pero que mantendrá informada a la ciudadanía, como manda la Constitución, dijo que no se negará a los jóvenes a que estudien la carrera de sus sueños.


Este tipo de discursos inaugurales suelen ser espléndidos y bonitos, y aunque la sabiduría popular dice que “del dicho al hecho hay mucho trecho”, esperamos por el bien del país, que al licenciado Moreno le vaya muy bien, aunque 15 funcionarios del anterior régimen se mantengan en su gabinete, aunque el único apellido runa que aparece por ahí en los últimos lugares, sea el de Cholango Tipanluisa. Ecuador ha tenido un respiro en medio del pesado aire político que reinaba hasta el momento, bajo la sombra de Rafael Correa, que como se dijo, iría a tierra belga. Los ecuatorianos todos, tenemos una nueva oportunidad de enrumbarnos en la vía de la unidad, el trabajo y el progreso. 

viernes, 19 de mayo de 2017

La lactosa y los genes

Aunque en Wikipedia se señale que una gran parte de las personas que creen tener intolerancia  a la lactosa, no presentan en realidad malabsorción de la lactosa, sino que sus síntomas gastrointestinales se deben a la presencia de enfermedades no diagnosticadas que afectan al intestino delgado; investigaciones muy serias demuestran que esta intolerancia del sistema digestivo se relaciona de manera preponderante a la genética de las personas. ¿Pero qué es la lactosa? No es nada más que un compuesto natural de la leche, al que se lo conoce también como el azúcar de la leche. Estudios señalan que solo el 3 al 5% de los europeos presentan intolerancia a la lactosa, mientras que del 40 al 60% de la población latinoamericana es intolerante a este compuesto lácteo, y en varios países de Asia y África esta cifra llega al 50%.

Estudios concluyen también que esta enfermedad, si es que se lo puede llamar así, se relaciona al grupo genético de una persona. En nuestro caso, tomando en cuenta a los tres grupos importantes en el país: europeos, amerindios y afros, cabe señalar que la población indígena es la menos tolerante, ya que la leche nunca fue parte de su dieta ancestral, sino más bien fue introducida por los españoles. Por lo que las personas que tienen más porcentaje de genes indígenas, tienen más probabilidad de malabsorción de la lactosa. El estudio sugiere que el 70% de la población ecuatoriana tiene algún grado de intolerancia a la lactosa. Ventajosa y lógicamente se puede suplir este alimento con otros productos como el brócoli, chocho, hígado, huevos, frutas y otros que remplacen a la leche.


Apartándonos un poco del asunto biológico, esto pone una clara evidencia de que nuestro país tiene una población preponderantemente indígena, aunque los prejuicios y el racismo histórico traten de negarlo u ocultarlo. Aunque los censos oficiales fijen porcentajes ridículos a lo indígena, como con un 7% de la población total. “No se podrá tapar el sol con un dedo”.

viernes, 12 de mayo de 2017

Venezuela: La evolución del molotov

   Foto: elnuevoherald.com

No se podría decir que exactamente es una democracia, cuando el pueblo responde electoralmente, bajo el engaño o la amenaza; o más aún, cuando el poder esté maquiavélicamente secuestrado por una élite política, sin importar sus motivaciones o sus cánticos ideológicos. Es lo que sucede en Venezuela, país que en su antaño se llenaba de gloria, por ser la cuna del Libertador Simón Bolívar y del gran Antonio José de Sucre; nación hermana que hace unas cuatro décadas se constituía en el dorado de Sudamérica, por su privilegiada situación geográfica y petrolífera. Ecuatorianos, peruanos y gentes de diversas naciones se encaminaban hacia el “sueño venezolano”, en la búsqueda de mejores días para sus familias. Cuna de las más bellas mujeres del mundo, de las únicas telenovelas que competían con las mexicanas, de los más famosos cantantes y grupos musicales de Iberoamérica, de la arepa y el joropo. Con una de las mayores reservas de petróleo en el mundo, Venezuela bien pudo ser una potencia hegemónica a nivel de Latinoamérica, si la clase política hubiese trabajado con un proyecto de desarrollo sostenible a largo plazo; pero esto lamentablemente no sucedió.

El Socialismo del Siglo XXI chavista, ha permitido que un tal Nicolás Maduro, uno de los hombres más incompetentes para gobernar un país, lleve a Venezuela a estas alturas de la Revolución Bolivariana, hasta el fondo del abismo. Venezuela por hoy es uno de los países más inseguros del mundo, con una inflación prevista del 720% para este año, una élite política enfrascada en actos de corrupción y el narcotráfico, una crisis humanitaria declarada y un sistema institucional que por cualquier lado apesta a una dictadura militarizada. Las víctimas mortales de los últimos enfrentamientos, entre manifestantes y la Guardia Nacional Bolivariana, ya suman 39 y centenas de heridos. La oposición en pleno plan de lucha social, no escatima en cuanto a ingenio, esta vez se enfrentan a los gases lacrimógenos de la Guardia Nacional, con “pupotov”, una especie “molotov” pero hecho con excremento. ¿Será que al fuego se lo elimina con fuego, como dicen?

domingo, 7 de mayo de 2017

El regreso del ‘loco’

La mayoría de jóvenes ecuatorianos menores de 30 años, poco o nada recordarán del pintoresco personaje de la política ecuatoriana de fines del siglo pasado, llamado Abdalá Bucarán Ortiz, de ascendencia libanesa; quien fue presidente del Ecuador por un breve periodo comprendido, entre agosto de 1996 y febrero del siguiente año, cuando el Congreso Nacional, actualmente Asamblea Nacional, lo destituyó argumentando “incapacidad mental para gobernar”. El ascenso de “El loco que ama” al poder en el Ecuador, fue el resultado de la máxima expresión del populismo desde los tiempos de Velasco Ibarra; al que el electorado ecuatoriano siempre ha tenido una clara debilidad. El corto gobierno de Bucaram fue calamitoso y escandaloso de proporciones internacionales, donde relucían varios casos de corrupción. Fue él precisamente quien inauguró el show en la tarima política, con presentaciones, cánticos y bailes un tanto extravagantes para la primera autoridad del país. Parece que esto de los payasitos, el berrinche, la demagogia pura y cruda en escenario, le sigue todavía gustando un poco a las masas.

Bucaram regresará después de haber permanecido 20 años en Panamá, en calidad de exiliado, una vez que la Corte Nacional de Justicia declaró prescritos los juicios que pesaban en su contra, por los casos de Gastos Reservados y Mochila Escolar. El regreso como lo hizo una vez, será espectacular, en helicóptero ante una gran concentración prevista para el 17 de junio, en el suburbio de Guayaquil, con un claro mensaje de que regresa con aspiraciones políticas, tal como ya lo confirmó su hijo “Dalo” Bucaram, en una entrevista televisiva. Aunque no dudo de la cobertura y la afluencia de personas a dicho evento político, a sabiendas de que los ecuatorianos tienen una preferencia especial por los caudillos populistas, dudo que Bucaram padre, pueda nuevamente pisar fuerte entre el electorado ecuatoriano que es joven en su esencia. Es de sapiencia popular que las cosas buenas de antaño, por más que se quiera, no se pueden volver a repetirlas en los mismos términos.

viernes, 28 de abril de 2017

La historia menos conocida

Se podría señalar que la historia más conocida de Ecuador, prácticamente se remite a los acontecimientos sucedidos a raíz de la fundación española de la ciudad de Quito. Varios investigadores como los religiosos Juan de Velasco y Federico Gonzáles Suárez, han tratado de develar esta parte de la historia antigua de la región de los quitus, en base a las historias contadas de generación en generación, remitiéndose a los cronistas de indias y la investigación arqueológica. A estos estudiosos se han unido un nutrido número de investigadores y autores como Segundo Moreno Yánez, que en su libro “Historia antigua del país Imbaya”, realiza importantes revelaciones en torno a las características de las culturas precolombinas que habitaron la región norte de Quito.

Con respecto a los cacicazgos existentes en la zona, Yánez señala que “Hasta el momento pocos son los datos que conocemos sobre el principal poblado del cacicazgo de Cayambe. Parece que la residencia de los señores étnicos no se cambió de lugar con las reducciones españolas, como fue el caso del Otavalo ancestral.” Esto a razón de que hasta el siglo XVIII, se podían observar vestigios de estructuras monumentales, que al parecer fueron templos o adoratorios, que se habían levantado hace ya siglos en la zona de Cayambe. “Más de medio siglo después, Francisco José de Caldas pudo observar en la orilla occidental de la laguna de San Pablo, un edificio de piedra bruta con solo los frentes labrados y unidos con una argamasa de lodo. Su figura era circular, sin ventanas, con una sola puerta, aunque los indios aseguraban que había tenido dos, su diámetro interior alcanzaba 46 pies; el ancho del muro 4 pies. El alto de la puerta no excedía la estatura de un hombre y terminaba en un pequeño arco el que estaba construido con piedras trabadas unas con otras.” Eran construcciones de gran altura, pero lo que me sorprende es que el mismo Caldas, encontró un “monumento parecido” en la comunidad de Agato; mi “llakta” a la que siempre vuelvo.

sábado, 22 de abril de 2017

Del dicho al hecho, hay mucho trecho


Es muy común escuchar a la gente decir, que por hoy existen una serie de enfermedades como el cáncer principalmente y otras como la diabetes, la hipertensión, la gastritis, entre otras tantas, que cobran la vida de millones de personas en el mundo; y que antes no existían estas enfermedades, se repite. Se da una especie de condena a la modernización, la contaminación, el consumo de productos procesados, el sedentarismo, el uso de productos químicos en la agricultura, en fin al mismo tipo de vida estresada que tenemos en la actualidad. Se habla en el sentido de que antes la vida era mejor y que ahora estamos expuestos a todas estas calamidades de la modernidad. En parte podrían tener razón, pero más que dejarnos llevar por ciertas creencias que llegan a convertirse en mitos, vale conocer lo que realmente sucede en el mundo.

Primero debemos convencernos que antes al igual que ahora, todos se morían por diversas circunstancias, y eso por lo pronto no cambiará todavía, aunque se especula que el ser humano en el futuro podría vivir unos 150 años o más, o incluso que podría alcanzar la inmortalidad. Lo que hay que saber también es el hecho de que hace aproximadamente un siglo, la esperanza de vida por ejemplo en España, era apenas de 35 años de edad; por hoy el mismo país ostenta uno de los mayores índices, con una edad promedio aproximada de vida de 78 años para los varones y 82 años para las mujeres. Esto ilustra claramente, de que a diferencia de lo que sucede ahora, antes muchísimas personas no llegaban a viejos por la elevada tasa de mortalidad, especialmente por la muerte prematura, las enfermedades endémicas, guerras, falta de alimentos, la ausencia de medicamentos, entre otros factores. Antes eran muy pocos los privilegiados que llegaban a los 80 años. Por hoy con el avance de la medicina y el control de las enfermedades, la revolución agrícola y la baja intensidad de los conflictos bélicos, más un adecuado estilo de vida, la gran mayoría de nosotros podríamos disfrutar de una vida longeva. Mucho ojo: “Del dicho al hecho, hay mucho trecho”

viernes, 14 de abril de 2017

El reto de Lenín Moreno

Más allá de que las elecciones presidenciales fueron justas, transparentes y democráticas o, no; parece que las fichas ya están dadas, Lenín Moreno sería el presidente de Ecuador durante los próximos cuatro años, a menos que suceda algo excepcional en la vida política de nuestro país. Con una economía en recesión, altos niveles de endeudamiento, credibilidad fracturada, polarización política y el duro embate de la naturaleza; Ecuador no es el tipo de país con el que soñaría un político a punto de hacerse cargo de la primera magistratura. Moreno, hombre bueno pero de escasa experiencia política, a razón de que la vicepresidencia o su estancia en Ginebra no constituye justamente una escuela que pudiera pulir un político de quilates como se quisiera, tiene un gran reto histórico en sus manos. La prueba de fuego en una primera instancia sería la estabilización de la economía por un lado, y la estabilización política, entendida como una acción que contrarreste la polarización y la división, que se ha generado entre la población ecuatoriana y que constituiría la principal amenaza al nuevo gobierno

Para lo primero bastaría rodearse de asesores económicos pragmáticos de primera línea, mientras el segundo aspecto referente a la polarización, no es una cosa sencilla y está supeditado al capital político y al liderazgo indiscutible de la primera autoridad. Moreno tendría que sacudirse de la polvareda correísta y marcar su propia agenda en función de país, con un amplio acuerdo político y social a nivel nacional; si no, estaríamos camino a la “venezolanización” de nuestro país, con consecuencias catastróficas. Es sumamente importante hacer notar al próximo presidente, que no puede obviar el tema de la corrupción, el impulso verdadero y efectivo a la productividad que garantice un crecimiento económico sostenible, la independencia absoluta de los poderes del Estado, en especial del Poder Judicial, la restitución de las libertades fundamentales y la consolidación del Estado Plurinacional. Si Moreno no es capaz de asumir esta agenda básica para el país, estaríamos por perder cuatro años más.

viernes, 7 de abril de 2017

Elecciones sospechosas

En elecciones anteriores, desde que tengo uso de razón, nunca hubo sospechas de fraude tan grandes como las que hoy, después de la elección presidencial del 2 de abril, se han dado. Por más rivalidad ideológica y enemistad política que haya existido entre el candidato ganador y el perdedor, casi siempre, por no decirlo siempre, habido aceptación y resignación a los resultados emitidos; en primera instancia por los llamados “exit poll” y después ya a los resultados oficiales que siempre coincidían casi con el resultado final. Pero en esta ocasión las cosas cambiaron inexplicablemente, más aún si tomamos en cuenta que por hoy, se tiene el apoyo de las nuevas tecnologías de la información y transmisión de datos en forma instantánea, a más de eso el apoyo y la participación de distintos organismos, entre otros factores. Las empresas encargadas de las encuestas a boca de urna, dieron sus resultados al término de la elección, con una tremenda diferencia la una de la otra, que provocaron el festejo de las dos candidaturas en simultáneo, como los eventuales vencedores.

Según estas circunstancias, el ciudadano común con mínimo de inteligencia, se da cuenta de que aquí alguien está mintiendo. A más de eso vienen las denuncias de un apagón informático en el CNE, inconsistencias en miles de actas, entre otras. Por otro lado Polibio Córdova, representante de una encuestadora muy reconocida como es Cedatos, denuncia un nuevo ciberataque a su sistema informático, que espero no sea obra del hacker más famoso del mundo que tiene el Gobierno; así mismo la principal de Participación Ciudadana, Ruth Hidalgo, denunció haber recibido amenazas de muerte; un cúmulo de sucesos preocupantes.

Cuando los resultados marcan una mínima diferencia entre dos candidatos, más aún con estas anormalidades, es justo y necesario hacer una revisión exhaustiva del proceso electoral, si es necesario incluso revisar las urnas voto a voto para dar total legitimidad y legalidad al candidato ganador; si esto no ocurre, el país corre el riesgo de convertirse en un polvorín, y eso nadie quiere en las actuales circunstancias, en que la población se ha polarizado peligrosamente.

jueves, 6 de abril de 2017

Cambio de mando



Una foto de 2016 para la historia, Raúl Amaguaña entrega el bastón de mando a Patricio Lema, quien ejercerá la presidencia del Cabildo Kichwa de Otavalo hasta marzo de 2019 (Fuente EL COMERCIO)