viernes, 25 de noviembre de 2016

Faranduleros y sumisos

Grupos neonazis alrededor del mundo están al regocijo con la victoria de Trump en Estados Unidos. Un grupo de estos utiliza el típico saludo de los brazos extendidos y reivindica la Unión Americana para los blancos de origen europeo, exigiendo además que se cierren sus fronteras por 50 años. La desconfianza de los llamados “indocumentados” que suman por millones va en aumento, ahora esta gente experimenta un temor fundamentado en salir libremente a las calles, más aún frente a los blancos. Realmente es un escenario, no sé si exagerado, difícil de imaginarnos en pleno siglo XXI, donde la humanidad parecía que había aprendido de las brutalidades de las dos guerras mundiales y la Guerra Fría misma, que puso al mundo al filo del holocausto nuclear; todo por intransigencias ideológicas y los falsos nacionalismos. Está comprobado que cuando los presidentes pregonan o dan el ejemplo con cualquier barbaridad, sectores de la población, más que todo, sus seguidores, están listos para asimilarlo, o por lo menos a adoptar el papel cómplice de ser permisivos. Esto es lo que sucedió por ejemplo en la Alemania nazi.

Por otro lado casi siempre se acusa a los medios de comunicación de marcar tendencia hacia tal o cual sector político. Esta afirmación se ha derrumbado en el caso de Trump, pues estaba claro que los medios en Estados Unidos, estaban en clara contraposición al candidato republicano; a pesar de eso, ganó. Al principio casi nadie creía que un millonario farandulero, pueda realmente acceder a la Casa Blanca. Todos se equivocaron.

Más cerca, en Ecuador, como buenos copiones, ciertas organizaciones políticas, corrieron a buscar uno que otro farandulero y seguro que estarán muy optimistas en ganar. A veces realmente la política decepciona, más aún con lo que sucede en relación a la Asamblea Nacional. Ahora una sarta de legisladores sumisos que pasaron años y años alzando manos a disposición del paladín jurídico de la Presidencia, están a punto de finiquitar su “trabajo”; para dar paso a otro montón de ni sé quiénes. Claro, siempre hay excepciones también, pero estimo que serán muy pocos.

viernes, 18 de noviembre de 2016

La buena circulación

Hace ya mucho, por este mismo medio, insistía que las vías de tránsito eran cual venas y arterias del cuerpo humano. Una fluida y correcta circulación es sinónimo de buena salud, en ambos casos. En enhorabuena que las autoridades de turno hayan comprendido esta realidad en el país. Pero no quisiéramos que por un acierto lógico y de sentido común, el Gobierno se eche de laureles y se crea la mamá de todos los gobiernos. Para nada. Bien, regresando a lo nuestro, les comento que la vía que une Cayambe, Olmedo e Ibarra, se encuentra recién inaugurada y está en óptimas condiciones, quizá un tanto desconocida todavía por la falta de promoción de las autoridades competentes. Por este sector dominado por fincas y haciendas, o lo que quedan de ellas, el paisaje es espectacular. Durante el trayecto se puede disfrutar del color y aroma propios de un ambiente andino todavía limpio; además, la optimización de esta vía ha permitido de alguna forma, potenciar el turismo en este sector importante que corresponde a las provincias de Pichincha e Imbabura. En el sector de Zuleta se puede encontrar tiendas con la artesanía del lugar, como los ya reconocidos bordados a mano, como también lugares donde se ofrece comida autóctona como cordero, trucha y cui asado. El trayecto es sumamente tranquilo y pausado en contraste a la autopista que une Otavalo con las ciudades mencionadas.

Al otro lado de nuestro majestuoso Imbabura, hace ya un tiempo también se asfaltó la vía “antigua” que une Peguche, Ilumán y San Antonio, pero se lo hizo al apuro, o no sé cuál sería la palabra adecuada, solo se echó una capa delgada de asfalto sobre el empedrado, por lo que hoy ha comenzado a destruirse poco a poco. Entiendo que las autoridades y los técnicos conocedores del tema, tendrán la solución definitiva a este inconveniente. Es muy importante que cualquier tipo de vía, sean estos empedrados, adoquinados o asfaltados, estén en óptimas condiciones para que las diferentes actividades de pueblos y comunidades, fluya adecuadamente, sino corre el riesgo de enfermar. Es lo que sucede por ejemplo con la vía de circunvalación de Otavalo, nos está matando.

viernes, 11 de noviembre de 2016

El triunfo de Trump

La victoria del candidato republicano en las elecciones presidenciales del pasado 8 de noviembre en Estados Unidos, dejó perplejo a más de medio mundo. Se suele decir que cada nación tiene el gobernante que se merece. ¿Pero realmente EE.UU. se merece un presidente de las características del señor Trump? ¿Acaso el largo listado de las cualidades negativas del Presidente electo norteamericano, son los nuevos valores o paradigmas para el gobernante del país más poderoso del mundo, que de alguna forma va marcando tendencias a nivel mundial? La respuesta aparentemente fácil, es complicada.

La explicación podría estar en que el electorado de cualquier país del mundo, puede cansarse de los vicios del sistema político vigente y sus actores más visibles, y aprovechándose de la vigencia democrática, quieren dar una lección a la clase política de sus respectivos países. Esto es lo que sucedió por ejemplo en Venezuela, Ecuador, España, para citar apenas tres estados. Recordemos por ejemplo como, ya hace mucho tiempo en Italia, se eligió como honorable parlamentaria a una famosa actriz porno llamada Cicciolina, provocando más de un escándalo y mermando obviamente la “concentración” de los “honorables” asambleístas, en su “noble tarea” de legislar.

También se dice que el electorado fuerte, el pueblo llano, vulgar e ignorante, es fresa fácil para los políticos que capitalizan los sentimientos más profundos, el escándalo y los falsos ofrecimientos; o sea el populismo puro y llano. Por lo visto el populismo no ha sido un “patrimonio” solo de los países tercermundistas, sino que ahora ha florecido en “La Meca del conocimiento y el desarrollo”. Un fenómeno que preocupa incluso a líderes políticos europeos, donde empiezan a florecer los falsos nacionalismos, la intolerancia e incluso la xenofobia. Un ambiente premonitorio de gran preocupación. Sea cual fuere la respuesta, que ¡Dios salve al mundo!

viernes, 4 de noviembre de 2016

Entre la bicicleta y la gloria

La noticia, de trascendencia para el deporte nacional, de manera especial para el norte del país, casi pasó desapercibida. Richard Carapaz, un muchacho carchense de 23 años de edad, se convirtió en el primer ciclista ecuatoriano en fichar por el equipo Movistar Team de España y ser parte del World Tour, que compite en la máxima categoría del ciclismo mundial. Es como si un futbolista del Valle del Chota, pasara a jugar en el Barcelona de España.

Más allá de los grandes talentos que tiene el deporte ecuatoriano, el apoyo de estamentos públicos o privados resulta insuficiente a la hora de dar ese empujoncito a los deportistas que sueñan en subirse al podio de la gloria. Para muestra tenemos los no tan alentadores resultados de la participación de la delegación ecuatoriana, en los Juegos Olímpicos de Brasil. En un país enfocado casi en su totalidad en el fútbol, es difícil surgir en otras disciplinas deportivas, por eso el mérito de jóvenes como Carapaz, es doble.

Enfocándonos en el ciclismo, podemos reafirmar que es uno de los deportes más completos, apasionantes y extremos que existen, y los beneficios para la salud dentro de una práctica amateur, son múltiples. Actualmente muchas personas, entre hombres y mujeres, jóvenes y mayores, se dedican al ciclismo en Imbabura y Carchi. Por eso es sumamente importante que el trazado de las vías contemple espacios para esta práctica. Es lamentable, por ejemplo que en la Ruta de los Lagos, la vía que une Ibarra con Otavalo, se les haya pasado este dato, como consecuencia el aumento de riesgo para los ciclistas que optan por entrenar en esta vía, es mayor. Por último no queda por demás insistir a los conductores, mucho ojo y respeto a los ciclistas.