Por exteriores la gran construcción se muestra moderna e
imponente, aparentemente la obra está concluida en su totalidad, o eso
suponemos los otavaleños que fuimos testigos de su inauguración, hace más de
cuatro meses, exactamente el 24 de mayo de este año; porque si eso no hubiese
sido el caso, el sentido común nos dice que no lo hubiesen inaugurado con
bombos y platillos. Además de su costo original que bordeaba los 18 millones de
dólares, se hizo un refinanciamiento de unos 3 millones, que nos imaginamos
fueron para concluir, con lo que hacía falta en esa mega estructura. Ahora la
pregunta es ¿qué tanto esperan para el traslado de comerciantes a las nuevas
instalaciones, que representa una inversión total de 30 millones de dólares con
terreno y todo? Ante el reclamo que por hoy se limita a un exhorto respetuoso,
el tipo de respuestas es conocida, tirarse la pelotita de un lado al otro: que
el alcalde anterior, que en eso estamos, que un grupo de comerciantes no
quieren pasar, que está mal construida, que la Contraloría, que queremos ser
accionistas, etc., mientras ya vamos para el cuarto año desde que empezaron los
trabajos en el sitio.
En esa obra existe mucho dinero público invertido, como para
que esté olvidado e improductivo; donde se estima que se pierden unos 65 mil
dólares mensuales, solamente por cuestiones de arriendo. La inoperancia de
parte de las autoridades municipales de Otavalo, en el asunto del nuevo mercado
24 de Mayo es evidente. Según funcionarios de la anterior administración, la
nueva infraestructura debía de entrar en funcionamiento en diciembre de 2014.
Es muy importante que las autoridades cumplan con los plazos establecidos por
ellos mismos, si no es así caerían en la demagogia y su credibilidad se iría al
piso. Se ha dicho que en septiembre que se acaba hoy, o a mediados de octubre.
¿Será, no será? Según los ánimos de estos señores funcionarios, lo dudo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario