Aunque la individualidad es una característica del ser
humano; el individualismo, el egoísmo y la falta de unidad de los
latinoamericanos, dan mucho más que pensar en una sola simple respuesta, de que
es una particularidad regional y nada más. No sé si es una mala dada herencia
indígena o un legado de las múltiples fusiones étnicas de los peninsulares
europeos que llegaron a estas tierras; o podría ser también un trauma
psicológico social, producida por la feroz conquista española. Sería oportuno
que los cientistas sociales, los antropólogos e incluso la psiquiatría social,
pongan sus sanos oficios en aras de establecer realmente qué sucede y
establecer el tratamiento adecuado.
En estos últimos largos años de efervescencia política de
corte izquierdista anti imperialista, que ha marcado hegemonía en Latinoamérica,
en la que se han escuchado emotivos cánticos y proclamas como el “alerta que
camina, la espada de Bolívar por América Latina”, el tema de una unidad real en
la construcción de la patria grande de Bolívar y San Martín, solo va quedando
en encuentros y efusivas proclamas convencionales, que van presagiando una vez
más, el maldito destino difícil de romper para Latinoamérica.
La UNASUR va quedando solamente en un bello membrete, y ni
qué hablar del ALBA. Los gobiernos llamados progresistas de la región, debieron
aprovechar la coyuntura política regional en su momento y fijar plazos bien
establecidos, hacia una transición real y concreta llamada Unión Suramericana. Causa
hasta un poco de gracia ver cómo esta esquiva unidad, se ve afectada por sucesos
triviales y domésticos como el ocurrido hace poco entre Ecuador y Perú, o lo
que acontece por estos días entre Venezuela y Colombia, por una simple visita
del gobernador de Miranda al gobierno colombiano. Con la transición política
que se ha dado en países como Chile y Paraguay, queda claro que las
celebraciones revolucionarias, pueden ser simplemente eventos fortuitos y hasta
eventos políticos folclóricos propios de nuestra región. A la final un trauma
es un trauma.
No hay comentarios:
Publicar un comentario